Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Juan 16:20 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

20 La verdad es que ustedes llorarán y se llenarán de tristeza, mientras que el mundo se alegrará. Ustedes se pondrán tristes, pero luego su tristeza se convertirá en alegría.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

20 De cierto, de cierto os digo, que vosotros lloraréis y lamentaréis, y el mundo se alegrará; pero aunque vosotros estéis tristes, vuestra tristeza se convertirá en gozo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

20 Les digo la verdad, ustedes llorarán y se lamentarán por lo que va a sucederme, pero el mundo se alegrará. Ustedes se lamentarán, pero su dolor se convertirá de pronto en una alegría maravillosa.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

20 En verdad les digo que llorarán y se lamentarán, mientras que el mundo se alegrará. Ustedes estarán apenados, pero su tristeza se convertirá en gozo.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

20 De cierto, de cierto os digo que vosotros lloraréis y os lamentaréis, y el mundo se alegrará. Vosotros os entristeceréis, pero vuestra tristeza se convertirá en gozo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

20 De verdad os lo aseguro: vosotros lloraréis y os lamentaréis, mientras que el mundo estará alegre; vosotros estaréis tristes, pero vuestra tristeza se convertirá en alegría.

Féach an chaibidil Cóip




Juan 16:20
44 Tagairtí Cros  

el triunfo del malvado ha sido breve, y efímero el gozo del impío.


Entonces, él transformó mi dolor en danza. Me quitó mi ropa de luto y me vistió de fiesta,


Un instante dura su ira; su gracia perdura de por vida. Las lágrimas pueden huir la noche entera, pero al amanecer habrá gozo.


La luz resplandece sobre los justos y la alegría sobre los que hacen lo recto.


En aquel día dirán: ―¡Alaben al Señor! Estuvo airado conmigo, pero ahora me consuela.


A todos los que guardan luto en Israel les dará: belleza en vez de cenizas, júbilo en vez de llanto, y alabanza en vez de abatimiento. Porque para gloria de Dios, él mismo los ha plantado como vigorosos y esbeltos robles.


Escuchen las palabras de Dios, todos los que le temen y tiemblan ante sus palabras: Sus hermanos los odian y los desechan por ser leales a mi nombre. «Den gloria a Dios», dicen burlándose, «gócense en el Señor». Pero ellos serán avergonzados debido a estas burlas.


Porque he dado reposo a los fatigados y gozo a los afligidos.


Pero cuando los labradores vieron que se acercaba, se dijeron: “Este no es nada menos que el heredero. Matémoslo y así nos quedaremos con la herencia”.


¡Dichosos los que lloran, porque serán consolados!


En ese mismo momento un gallo cantó por segunda vez, y Pedro se acordó de lo que Jesús le había dicho: «Antes que el gallo cante dos veces, me negarás tres veces». Y se echó a llorar.


Ella fue y avisó a los que habían estado con él, pues estaban tristes y llorando.


Cuando terminó de orar, volvió adonde estaban los discípulos y los encontró dormidos, estaban agotados por la tristeza.


Y Pedro salió de allí a llorar amargamente.


Mucha gente del pueblo y muchas mujeres lo seguían. Ellas lloraban por él y se golpeaban el pecho.


Él les preguntó: ―¿De qué vienen hablando por el camino? Se detuvieron; tenían los rostros embargados de tristeza.


Sin embargo, nosotros teníamos la esperanza de que él sería el libertador de Israel. Pero ya hace tres días que sucedió todo esto.


»Dichosos ustedes los que ahora pasan hambre, porque tendrán pan en abundancia. Dichosos ustedes los que ahora lloran, porque después reirán.


Yo les he dicho estas cosas para que en mí encuentren paz. En este mundo van a sufrir, pero anímense, yo he vencido al mundo.


Al contrario, se han llenado de tristeza por lo que les dije.


Después de decir esto, les mostró las manos y el costado. Los discípulos se alegraron de ver al Señor.


Al salir del concilio, los discípulos iban gozosos de haber sido tenidos por dignos de sufrir ultrajes por la causa del Nombre.


Y además de todo esto, también nos sentimos orgullosos en Dios, gracias a nuestro Señor Jesucristo, por quien ahora hemos sido reconciliados con Dios.


Tenemos el corazón adolorido, pero a la vez no nos falta el gozo. Parecemos pobres, pero enriquecemos a muchos; no tenemos nada, y, sin embargo, somos dueños de todo.


En cambio, este es el fruto que el Espíritu produce en nosotros: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad,


Ustedes siguieron nuestro ejemplo y el del Señor, cuando, a pesar de todo el sufrimiento, recibieron el mensaje con la alegría que da el Espíritu Santo.


Hermanos míos, que les dé gran alegría cuando pasen por diferentes pruebas,


Y ahora, que la gloria, la majestad, el imperio y la potencia sean eternamente del único Dios, Salvador nuestro por medio de Jesucristo, quien tiene poder para conservarlos sin caída y, con gran alegría, presentarlos sin tacha ante su gloriosa presencia. Amén.


Aquel será un día de júbilo mundial; en todas partes, las gentes felices intercambiarán regalos y organizarán fiestas en celebración de la muerte de los dos profetas que tanto las habían atormentado.


Ella ha vivido en derroches y en placeres sin límites; dale ahora dolores y penas sin límites. Ella se jacta diciendo: “En este trono soy reina. No soy ninguna viuda; nunca sufriré”.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí