Josué 10:40 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 200840 Josué conquistó toda la tierra: la región montañosa, las tierras bajas, y a todos sus reyes. Los destruyeron a todos como el Señor Dios les había ordenado, Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 196040 Hirió, pues, Josué toda la región de las montañas, del Neguev, de los llanos y de las laderas, y a todos sus reyes, sin dejar nada; todo lo que tenía vida lo mató, como Jehová Dios de Israel se lo había mandado. Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente40 Así que Josué conquistó toda la región: a los reyes y a los pueblos de la zona montañosa, el Neguev, las colinas occidentales y las laderas de las montañas. Destruyó por completo a todos los habitantes del territorio sin dejar a nadie con vida, tal como el Señor, Dios de Israel, lo había ordenado. Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)40 De ese modo castigó Josué a toda la región y a sus reyes: la montaña, el Negueb, las llanuras y las lomas. No dejó sobrevivientes, sino que lanzó el anatema sobre todo ser viviente como lo había ordenado Yavé, el Dios de Israel. Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion40 Así conquistó Josué todo el país: la serranía, el Neguev, la llanura y las estribaciones, y a todos sus reyes. No dejó sobreviviente. Exterminó todo lo que respiraba, tal como YHVH Dios de Israel había ordenado. Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 197540 Así fue dominando Josué todo el país: la montaña, el Negueb, la llanura, las vertientes, con todos sus reyes, sin dejar supervivientes. Y entregó al anatema a todos los seres vivientes, según había dispuesto Yahveh, Dios de Israel. Féach an chaibidil |
Abarcaba las regiones montañosas, los valles, el Arabá, las faldas de las montañas, el desierto de Judea, y el Néguev. Los pueblos que vivían allí eran los hititas, los amorreos, los cananeos, los ferezeos, los heveos y los jebuseos: El rey de Jericó; el rey de Hai, cerca de Betel; el rey de Jerusalén; el rey de Hebrón; el rey de Jarmut; el rey de Laquis; el rey de Eglón; el rey de Guézer; el rey de Debir; el rey de Guéder; el rey de Jormá; el rey de Arad; el rey de Libná; el rey de Adulán; el rey de Maquedá; el rey de Betel; el rey de Tapúaj; el rey de Héfer; el rey de Afec; el rey de Sarón; el rey de Madón; el rey de Jazor; el rey de Simrón Merón; el rey de Acsaf; el rey de Tanac; el rey de Meguido; el rey de Cedes; el rey de Jocneán del Carmelo; el rey de Dor, de la provincia de Nafot Dor; el rey de Goyim en Guilgal; y el rey de Tirsá. En total fueron treinta y uno los reyes que fueron destruidos junto con sus ciudades.
que contaba además con veintiséis ciudades: Jericó, Bet Joglá, Émec Casís, Bet Arabá, Zemarayin, Betel, Avín, Pará, Ofra, Quefar Amoní, Ofni y Gueba, Gabaón, Ramá, Berot, Mizpa, Cafira, Mozá, Requen, Irpel, Taralá, Zela, Élef, Jebús (que es Jerusalén), Guibeá y Quiriat. Estas fueron las ciudades que recibió la tribu de Benjamín con todos los pueblos que las rodeaban.