Jeremías 32:32 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 200832 Las malvadas acciones de Israel y Judá —del pueblo, de sus reyes, dignatarios, sacerdotes y profetas— me irritan. Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 196032 por toda la maldad de los hijos de Israel y de los hijos de Judá, que han hecho para enojarme, ellos, sus reyes, sus príncipes, sus sacerdotes y sus profetas, y los varones de Judá y los moradores de Jerusalén. Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente32 »Los pecados de Israel y de Judá —los pecados de la gente de Jerusalén, de los reyes, de los funcionarios, de los sacerdotes y de los profetas— han provocado mi enojo. Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)32 debido a todas las maldades que han cometido para hacerme enojar los hijos de Israel y de Judá, ellos, sus reyes, sus príncipes, sus sacerdotes, sus profetas, los hombres de Judá y los habitantes de Jerusalén. Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion32 por toda la maldad que cometían israelitas y judíos, irritándome todos con sus reyes y príncipes, con sus sacerdotes y profetas, los judíos y los moradores de Jerusalem. Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 197532 por todo lo malo que los hijos de Israel y los hijos de Judá han hecho para ofenderme, ellos, sus reyes, sus príncipes, sus sacerdotes y sus profetas, los hombres de Judá y los habitantes de Jerusalén. Féach an chaibidil |
Como el ladrón, la única vergüenza que Israel conoce es que lo atrapen. Reyes, príncipes, sacerdotes y profetas, en esto son iguales. A un poste labrado lo llaman padre suyo, y tienen por madre un ídolo labrado en piedra. ¡Pero cuando le llegan los tiempos de angustia es a mí a quien recurren pidiendo salvación!
Haremos lo que se nos antoje. Ofreceremos perfumes agradables en honor a la Reina del Cielo y le sacrificaremos cuanto nos plazca, igual que lo hicimos nosotros y nuestros antepasados, y nuestros reyes y príncipes en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén; porque en aquellos días teníamos abundancia de alimentos y estábamos bien acomodados y felices.
»”¡Oh Señor, tú eres justo, mientras que nosotros siempre estamos avergonzados porque sabemos que hemos actuado mal, tal como nos ves ahora! Sí, todos nosotros, los habitantes de Judá, el pueblo de Jerusalén y todo Israel, esparcidos por todas partes donde tú nos has echado a causa de nuestra deslealtad hacia ti.