Génesis 42:21 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

²¹ Luego se pusieron a conversar entre ellos y decían: ―Esto nos ha ocurrido como consecuencia de lo que le hicimos a José en nuestra juventud. Vimos el terror y la angustia suya y oímos sus ruegos, pero no le hicimos caso.

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Biblia Reina Valera 1960

²¹ Y decían el uno al otro: Verdaderamente hemos pecado contra nuestro hermano, pues vimos la angustia de su alma cuando nos rogaba, y no le escuchamos; por eso ha venido sobre nosotros esta angustia.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²¹ Y hablando entre ellos, dijeron: «Es obvio que estamos pagando por lo que le hicimos hace tiempo a José. Vimos su angustia cuando rogaba por su vida, pero no quisimos escucharlo. Por eso ahora tenemos este problema».

Biblia Católica (Latinoamericana)

²¹ y ellos comentaban entre sí: 'Verdaderamente estamos pagando lo que hicimos con nuestro hermano, pues a pesar de ver su aflicción y de oír sus súplicas, no le hicimos caso. Por eso ahora ha venido sobre nosotros esta desgracia.

La Biblia Textual 3a Edicion

²¹ Y cada cual decía a su hermano: De cierto somos culpables por nuestro hermano, pues vimos la angustia de su alma cuando nos rogaba, y no lo escuchamos, por eso ha venido sobre nosotros esta angustia.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²¹ Se iban diciendo unos a otros: 'En verdad somos culpables por lo de nuestro hermano, porque vimos la angustia de su alma cuando nos rogaba, y no lo escuchamos; por esto nos ha sobrevenido esta tribulación'.

Génesis 42:21 Tagairtí Cros

Génesis 41:9

Entonces el jefe de los coperos le dijo al faraón: ―Hoy recuerdo mi falta.

Génesis 44:16

Entonces Judá dijo: ―¿Qué podemos decirle a mi señor? ¿Qué podemos decir a nuestro favor? ¿Cómo podríamos alegar inocencia? Dios nos está castigando por nuestros pecados. Señor, todos nosotros hemos regresado para ser sus esclavos, todos, incluso aquél en cuyo costal se encontró la copa.

Génesis 45:3

―Yo soy José —les dijo a sus hermanos—. ¿Mi padre vive aún? Pero los hermanos, debido a la gran sorpresa, se quedaron mudos.

Génesis 50:15

Una vez muerto su padre, los hermanos de José sintieron miedo, pues pensaban que José les guardaba rencor, y aprovecharía la ocasión para vengarse de ellos por lo que le hicieron.

2 Samuel 12:13

―He pecado contra el Señor —contestó David a Natán. Natán le respondió: ―Sí, pero el Señor ya te ha perdonado; así que no morirás por este pecado.

1 Reyes 17:18

―¡Varón de Dios! —lloró ella—, ¿qué me has hecho? ¿Has venido aquí a castigarme por mis pecados, y a matar a mi hijo?

Proverbios 21:13

El que cierra sus oídos a los clamores del pobre no será escuchado cuando él tenga necesidad.

Proverbios 28:17

El asesino atormentado por su sentimiento de culpa, será un fugitivo hasta que muera. ¡Que nadie lo apoye!

Jeremías 2:17

¿No se dan cuenta aún que ustedes se han acarreado esto al rebelarse contra el Señor su Dios cuando él quería guiarlos y mostrarles la forma correcta de vivir?

Jeremías 2:19

Su propia maldad será su castigo. Verán lo malo y amargo que es rebelarse contra el Señor su Dios, abandonándolo sin temor, dice el Señor, el Señor de los ejércitos.

Jeremías 34:17

Por lo tanto, dice el Señor, como no quieren escucharme y liberarlos, yo los entregaré al poder de la muerte mediante la guerra, el hambre y la enfermedad. Y los esparciré por todo el mundo como exiliados.

Jeremías 4:18

Tu conducta malvada te ha acarreado esto, llenando de amargura tu corazón.

Oseas 5:15

Yo los abandonaré y volveré a mi hogar, hasta que ellos admitan su culpa y miren hacia mí en busca de ayuda. ¡Sí, en medio de su aflicción me buscarán!».

Números 32:23

»Pero si no cumplen lo que han prometido, pecarán contra el Señor, y pagarán las consecuencias.

Mateo 7:2

porque de la manera como juzguen a otros, así Dios los juzgará a ustedes; Dios los va a tratar de la misma forma en que ustedes traten a los demás.

Marcos 9:48

donde el gusano no muere, donde el fuego nunca se apaga.

Lucas 16:28

para que avise a mis cinco hermanos, y no vengan ellos también a este lugar de tormento”.

Hechos 19:18

Muchos de los que creyeron vinieron y confesaron sus malas acciones;

Santiago 2:13

pues al que no ha tenido compasión se le juzgará sin compasión. Y el que ha mostrado compasión triunfará a la hora del juicio.

1 Juan 1:9

Pero si confesamos a Dios nuestros pecados, él, que es fiel y justo, nos perdonará y nos limpiará de toda maldad.

Jueces 1:7

«Setenta reyes sin pulgares en las manos y los pies recogían migajas debajo de mi mesa» —dijo Adoní Bézec—. Ahora el Señor me ha pagado con lo mismo. Después lo llevaron a Jerusalén y allí murió.