2 Reyes 10:5 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 20085 Entonces el administrador de los asuntos del palacio y el gobernador de la ciudad, junto con las demás autoridades de la ciudad y los que cuidaban a los hijos de Acab, le enviaron este mensaje: «Jehú, somos tus siervos y haremos todo lo que nos digas. No proclamaremos como rey a ninguno de los hijos de Acab. Queremos que tú seas nuestro rey. Haz lo que creas conveniente». Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 19605 Y el mayordomo, el gobernador de la ciudad, los ancianos y los ayos enviaron a decir a Jehú: Siervos tuyos somos, y haremos todo lo que nos mandes; no elegiremos por rey a ninguno, haz lo que bien te parezca. Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente5 Así que los administradores del palacio y de la ciudad, junto con los ancianos y con los tutores de los hijos del rey, enviaron el siguiente mensaje a Jehú: «Somos sus sirvientes y haremos todo lo que nos diga. No proclamaremos rey a nadie; haga lo que mejor le parezca». Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)5 El mayordomo del palacio, el gobernador de la ciudad, los ancianos y los que educaban a los hijos del rey dieron a Jehú esta respuesta: 'Somos tus servidores y haremos todo lo que nos pidas. No proclamaremos rey. Haz lo que mejor te parezca'. Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion5 Y el que estaba sobre el palacio, y el que estaba sobre la ciudad, y los ancianos, y los tutores, enviaron a decir a Jehú: ¡Somos tus siervos y haremos todo lo que nos digas! No proclamaremos rey a nadie; haz lo que te parezca bien ante tus ojos. Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 19755 Y el mayordomo del palacio, el gobernador de la ciudad, los ancianos y los preceptores enviaron a decirle: 'Somos tus siervos y haremos cuanto nos digas. No proclamaremos rey a nadie; haz tú lo que mejor te parezca'. Féach an chaibidil |
Jehú les escribió otra carta, con el siguiente mensaje: «Si de verdad están de mi parte, y están dispuestos a obedecerme, les pido que mañana, a esta hora, vayan a Jezrel y me lleven las cabezas de los hijos de Acab». (Los setenta hijos del rey Acab vivían con los hombres que estaban a cargo de su crianza).