1 Samuel 5:8 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 20088 Convocaron una conferencia con los dirigentes de las cinco ciudades de los filisteos para decidir la manera de deshacerse del cofre. Decidieron llevarla a Gat. Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 19608 Convocaron, pues, a todos los príncipes de los filisteos, y les dijeron: ¿Qué haremos del arca del Dios de Israel? Y ellos respondieron: Pásese el arca del Dios de Israel a Gat. Y pasaron allá el arca del Dios de Israel. Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente8 De modo que convocaron a los gobernantes de las ciudades filisteas y les preguntaron: —¿Qué debemos hacer con el arca del Dios de Israel? Los gobernantes deliberaron y contestaron: —Trasládenla a la ciudad de Gat. Así que trasladaron el arca del Dios de Israel a Gat. Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)8 Mandaron pues una citación a todos los príncipes de los filisteos y los reunieron en su ciudad. Les dijeron: '¿Qué haremos con el arca del Dios de Israel?' Los demás respondieron: 'El arca del Dios de Israel irá a Gat'. Llevaron allá el arca del Dios de Israel. Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion8 Y convocaron a todos los príncipes de los filisteos, y dijeron: ¿Qué haremos con el Arca del Dios de Israel? Y ellos respondieron: Que el Arca del Dios de Israel sea trasladada a Gat. E hicieron trasladar el Arca del Dios de Israel. Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 19758 Convocaron, pues, a todos los príncipes de los filisteos y les preguntaron: '¿Qué haremos con el arca del Dios de Israel?'. Respondieron ellos: 'Que el arca del Dios de Israel sea trasladada a Gat'. Y trasladaron el arca del Dios de Israel. Féach an chaibidil |
Entonces Goliat, campeón filisteo de Gat, salió de las filas filisteas y desafió a las fuerzas de Israel. Era un gigante de casi tres metros de alto. Usaba un yelmo de bronce, una cota de malla de unos sesenta kilos, grebas de bronce para las piernas, y una jabalina de bronce de varios centímetros de espesor, en cuyo extremo había una punta de lanza de hierro de más de siete kilos. Y su escudero llevaba un gran escudo delante de él. Goliat se paró y gritó para que lo oyeran los israelitas: «¿Necesitan todo un ejército para solucionar esto? Yo represento a los filisteos. Escojan a alguien que los represente y decidiremos la batalla en un combate singular.