Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Génesis 45:20 - Biblia Version Moderna (1929)

20 Y no se os dé nada de vuestros ajuares; porque lo mejor de toda la tierra de Egipto es vuestro.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

20 Y no os preocupéis por vuestros enseres, porque la riqueza de la tierra de Egipto será vuestra.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

20 No se preocupen por sus bienes personales, pues lo mejor de la tierra de Egipto será de ustedes”».

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

20 No se preocupen por las cosas que dejan allá, pues lo mejor de Egipto será para ustedes.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

20 Y no os preocupéis por vuestros enseres, porque lo mejor de toda la tierra de Egipto es vuestro.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

20 Que no os duela dejar vuestras cosas, porque lo mejor de la tierra de Egipto sera para vosotros''.

Féach an chaibidil Cóip




Génesis 45:20
23 Tagairtí Cros  

Y le dijo Abimelec: He aquí, mi tierra está delante de ti; en donde tuvieres a bien, habita.


y tomad a vuestro padre y a vuestras familias, y venid a mí; que yo os daré lo mejor de la tierra de Egipto, y comeréis de la grosura de la tierra.


Puesto que has sido mandado, haced esto: Tomaos de la tierra de Egipto carros para vuestros niños y para vuestras mujeres; traed también a vuestro padre y venid.


Y los hijos de Israel lo hicieron así; y José les dió carros por mandato de Faraón; dióles también provisión para el camino.


la tierra de Egipto está delante de ti; en lo mejor de la tierra haz habitar a tu padre y a tus hermanos; habiten en la tierra de Gosén: y si conoces que hay entre ellos hombres hábiles, ponlos por mayorales de mi ganado.


ahora pues no habéis de dar vuestras hijas a los hijos de ellos, ni tomaréis sus hijas para vuestros hijos; ni tendréis consorcio con ellos, procurando su paz y su prosperidad, para siempre; para que seais fuertes, y comáis del bien de la tierra, y la dejéis como herencia a vuestros hijos para siempre.


¶Cuando un hombre diere a su prójimo dinero o alhaja a guardar, y fuere hurtado de la casa del tal hombre, si se hallare al ladrón, restituirá el doble.


Si fuereis bien dispuestos y obedientes, de lo mejor de la tierra comeréis;


Y con sus arcos destrozarán a los jóvenes; y no tendrán compasión del fruto del seno; y sus ojos no perdonarán a los niños.


Sin embargo los perdonó mi ojo, para que no fuesen destruídos; por lo cual no los exterminé en el desierto.


Y mi ojo no te perdonará, ni tendré piedad; porque traeré tus caminos sobre ti, y tus abominaciones estarán en medio de ti; y conoceréis que yo soy Jehová.


Y mi ojo no perdonará, ni tendré piedad; conforme a tus caminos te recompensaré; y tus abominaciones estarán en medio de ti; y conoceréis que yo, Jehová, soy quien os castiga.


Luego dijo a los otros, oyéndolo yo: ¡Pasad por la ciudad, tras de él, y herid! ¡no perdone vuestro ojo, ni tengáis compasión!


y el que estuviere sobre el terrado, no descienda a sacar nada de su casa;


¶En aquel día, el que estuviere sobre el terrado, y sus efectos en la casa, no descienda para llevárselos; y asimismo el que estuviese en el campo, no vuelva atrás.


Tu ojo no tendrá compasión de él: así limpiarás de Israel la sangre inocente, para que te vaya bien.


No le compadecerá tu ojo: exíjase vida por vida, ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie.


Así has de destruir a todas las naciones que Jehová tu Dios te va a entregar; no las perdonará tu ojo, para que no sirvas a sus dioses; pues esto te sería causa de ruina.


Israel ha pecado, y también ha traspasado mi pacto que les prescribí, y también han tomado del anatema, y también han hurtado, y también han mentido, y también lo han puesto entre sus efectos.


Por lo cual preguntaron otra vez a Jehová: ¿Ha venido aún ese hombre? Y respondió Jehová: Hele allí escondido entre el bagaje.


Entonces dijo David a sus hombres: ¡Ceñid cada uno su espada! Y se ciñeron cada uno su espada, ciñéndose también David su espada: y subieron tras David como cuatrocientos hombres, quedándose doscientos con el bagaje.


Y ¿quién os escuchará en esta propuesta? antes bien, conforme a la porción del que bajó al combate, así ha de ser la porción del que se quedó con el bagaje; compartan de un mismo modo.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí