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Salmos 6:4 - Biblia Martin Nieto

4 Yo estoy totalmente deshecho; y tú, Señor, ¿hasta cuándo?

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Biblia Reina Valera 1960

4 Vuélvete, oh Jehová, libra mi alma; Sálvame por tu misericordia.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

4 Vuelve, oh Señor, y rescátame; por tu amor inagotable, sálvame.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

4 Vuélvete a mí, Señor, salva mi vida, y líbrame por tu gran compasión.

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La Biblia Textual 3a Edicion

4 Vuélvete YHVH, y rescata mi alma, Sálvame por tu misericordia.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 mi vida languidece de temblor, y tú, Yahveh, ¿hasta cuándo?

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Salmos 6:4
20 Tagairtí Cros  

pero invoqué el nombre del Señor: 'Anda, Señor, sálvame la vida'.


me ha librado de la muerte, mis ojos de las lágrimas, mis pies de la caída.


'Señor, líbrame de los labios mentirosos y de la lengua falsa'.


El Señor te guardará de todo mal, él guardará tu vida;


¿Hasta cuándo, Señor, seguirás olvidándome?, ¿hasta cuándo me esconderás tu rostro?


Levántate, Señor; sal a su encuentro, derríbalos; líbrame con tu espada del malvado.


Mas tú, Señor, no te quedes lejos; fuerza mía, ven corriendo en mi auxilio,


olvídate de los pecados de mi juventud y de mis faltas; acuérdate de mí, Señor, con misericordia y con bondad.


sentados a la puerta me critican, hasta soy la canción de los borrachos.


¿Hasta cuándo, oh Dios, seguirá blasfemando el enemigo?, ¿hasta cuándo seguirá ultrajando el opresor?


¿Hasta cuándo, Señor, tu ira, que no termina nunca; tu celo, que quema como un fuego?


el jabalí salvaje la devaste y las bestias del campo la devoren?


pues tu misericordia conmigo fue muy grande, me has librado del fondo del abismo.


Vuelve con nosotros, Señor. ¿Hasta cuándo? Ten piedad de tus siervos.


Oh, sí, en salud se cambia mi amargura. Tú has salvado mi vida de la fosa vacía, te has echado a las espaldas todos mis pecados.


Inclina, Dios mío, tus oídos y escucha. Abre tus ojos y mira nuestras ruinas y la ciudad sobre la cual se invoca tu nombre. Oh, no; no apoyados en nuestras obras justas presentamos nuestras súplicas ante ti, sino en tu gran misericordia.


Desde los días de vuestros padres os habéis apartado de mis mandamientos y no los habéis observado. Volved a mí, y yo volveré a vosotros -dice el Señor todopoderoso- Pero vosotros decís: '¿En qué tenemos que volver?'.


para hacer resplandecer la gracia maravillosa que nos ha concedido por medio de su querido Hijo.


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