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Jeremías 9:15 - Biblia Martin Nieto

15 Los dispersaré entre las naciones que no conocieron ni ellos ni sus padres y enviaré tras ellos la espada hasta exterminarlos'.

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Biblia Reina Valera 1960

15 Por tanto, así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: He aquí que a este pueblo yo les daré a comer ajenjo, y les daré a beber aguas de hiel.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

15 Así que ahora esto dice el Señor de los Ejércitos Celestiales, Dios de Israel: ¡mira!, los alimentaré con amargura y les daré veneno para beber.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

15 Los desparramaré entre las naciones que no conocieron ni ellos ni sus padres, y detrás de ellos enviaré la espada hasta acabar con todos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

15 Por tanto, así dice YHVH Sebaot, Dios de Israel: He aquí, Yo daré a comer a este pueblo ajenjo, y les daré a beber aguas venenosas.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

15 Los dispersaré por las naciones que ni ellos ni sus padres conocieron, y enviaré detrás de ellos a la espada hasta acabar con ellos'. Así, dice Yahveh Sebaot:

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Jeremías 9:15
19 Tagairtí Cros  

Nos has rechazado, oh Dios, nos has deshecho, te has irritado, devuélvenos la fuerza;


El ultraje quebró mi corazón, estoy perdido, esperé compasión, pero fue en vano, consoladores, y no encontré ni uno.


Dios es el que juzga: a unos humilla y a otros los ensalza.


¿Hasta cuándo, Señor, Dios todopoderoso, te indignarás contra las oraciones de tu pueblo?


La arrogancia humana será humillada, el orgullo del hombre será abatido; sólo el Señor será exaltado el día aquel.


Dejad de confiar en el hombre, pues sólo un soplo hay en su nariz. ¿Cuánta estima merece?


Por esto, así dice el Señor omnipotente sobre los profetas: Yo les daré a comer ajenjo, y a beber agua envenenada; porque de los profetas de Jerusalén sale la impiedad para todo el país'.


Los convertiré en objeto de horror para todos los reinos de la tierra; oprobio, chisme, escarnio y maldición en todos los países en que los arroje.


El Señor, Dios de Israel, me dijo: 'Toma de mi mano esta copa de vino y dásela a beber a todas las naciones a las que yo te mando,


Voy a montar guardia sobre ellos para su daño y no para su bien, y todos los hombres de Judá que están en Egipto perecerán por la espada y el hambre hasta quedar completamente exterminados,


Haré temblar a Elán ante sus enemigos, frente a los que buscan su muerte. Traeré sobre ellos la desgracia, el furor de mi cólera -dice el Señor-. Haré que la espada los persiga hasta que yo los haya exterminado.


¿Por qué nos estamos sentados? Reuníos, entremos en nuestras ciudades fortificadas para morir allí, porque el Señor nuestro Dios nos entrega a la muerte, nos da a beber agua envenenada por haber pecado contra él.


Me ha hartado de amargura, me ha abrevado con ajenjo.


Recordar mi miseria y mi angustia es hiel y veneno.


Un tercio de tus habitantes morirá de peste y se consumirá de hambre en medio de ti, otro tercio caerá a cuchillo en tus alrededores y el otro lo esparciré yo a todos los vientos, desenvainando detrás de ellos la espada.


Cuando se cumplan los días del asedio, quemarás al fuego una tercera parte en medio de la ciudad, otra tercera parte la cortarás a espada en sus alrededores y la otra la esparcirás al viento, mientras que yo desenvainaré la espada detrás de ellos.


El Señor te hará ir a ti y al rey que hayas constituido sobre ti a una nación desconocida para ti y para tus padres, y allí servirás a dioses extranjeros, hechos de leño y de piedra,


Si alguno, después de haber oído las palabras de este juramento, se hace ilusiones y dice: Todo me saldrá bien, aunque haga lo que me dé la gana, pues la abundancia de agua apaga la sed,


El nombre de la estrella es ajenjo. Y la tercera parte de las aguas se convirtió en ajenjo, y muchos hombres murieron por estas aguas, que se habían vuelto amargas.


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