Jeremías 31:19 - Biblia Martin Nieto

¹⁹ Sí, después de mi desvío me has arrepentido, he comprendido y me he golpeado el pecho. Estoy humillado, lleno de vergüenza; mi juventud ha sido un escándalo, y ahora soporto las consecuencias'.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

¹⁹ Porque después que me aparté tuve arrepentimiento, y después que reconocí mi falta, herí mi muslo; me avergoncé y me confundí, porque llevé la afrenta de mi juventud.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁹ Me aparté de Dios, pero después tuve remordimiento. ¡Me di golpes por haber sido tan estúpido! Estaba profundamente avergonzado por todo lo que hice en los días de mi juventud”.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁹ Si bien me he descarriado, ahora me arrepiento, me doy cuenta y me golpeo el pecho. Estoy avergonzado y confundido, pues pesa sobre mí mi infame juventud.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁹ Si me aparté, después me arrepentí: Reconocí mi falta y herí mi muslo; Me avergoncé y aún quedé confuso, Porque llevaba la afrenta de mi juventud.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁹ Porque después de haberme convertido, siento arrepentimiento; y después de haberme conocido, me doy golpes de pecho; estoy avergonzado y compungido, y soporto la infamia de mi juventud'.

Jeremías 31:19 Tagairtí Cros

Esdras 9:6

y exclamé: 'Dios mío, estoy confundido y me avergüenzo de levantar mi rostro hacia ti, porque nuestras iniquidades sobrepasan nuestra cabeza, y nuestros delitos llegan hasta el cielo.

Job 13:26

Pues dictas contra mí amargos fallos y me imputas la falta de mi mocedad;

Job 20:11

Sus huesos, que rebosaban de vigor juvenil, yacerán con él en el polvo.

Salmos 119:67

antes de que me humillaras andaba extraviado, pero ahora guardo tu palabra;

Salmos 25:7

olvídate de los pecados de mi juventud y de mis faltas; acuérdate de mí, Señor, con misericordia y con bondad.

Isaías 54:4

No temas, pues no tendrás ya que avergonzarte; no te sonrojes, pues no serás ya confundida; olvidarás la afrenta de tu juventud y no te acordarás del oprobio de tu viudez.

Jeremías 22:21

Te hablé en la hora de tu prosperidad. Tú dijiste: '¡No quiero escuchar!'. Ése ha sido tu camino desde tu juventud: no escuchar mi voz.

Jeremías 3:25

¡Acostémonos en nuestra ignominia y nos cubra nuestro oprobio, porque contra el Señor, nuestro Dios, hemos pecado nosotros y nuestros padres desde nuestra juventud hasta el presente y no hemos escuchado la voz del Señor, nuestro Dios!'.

Jeremías 32:30

Porque el pueblo de Israel y el pueblo de Judá tan sólo han hecho desde su juventud lo que me desagrada; sí, los israelitas no han hecho más que irritarme con las obras de sus manos -dice el Señor-.

Ezequiel 21:12

Y cuando te pregunten: ¿Por qué gimes?, les dirás: Por una noticia, a cuya llegada se derretirá todo corazón, desmayarán todos los brazos, se consternará todo ánimo y todas las rodillas vacilarán. Ya llega, ya se cumple, dice el Señor Dios'.

Ezequiel 21:17

Grita, aúlla, hijo de hombre, porque está destinada a mi pueblo, todos los príncipes de Israel, entregados a la espada junto con mi pueblo. Hiérete las caderas,

Ezequiel 23:3

Se prostituyeron en Egipto desde su juventud. Allí palparon su pecho y acariciaron su seno virginal.

Ezequiel 36:26

Os daré un corazón nuevo y os infundiré un espíritu nuevo; quitaré de vuestro cuerpo el corazón de piedra y os daré un corazón de carne.

Ezequiel 36:31

Recordaréis vuestra perversa conducta y vuestras malas acciones y sentiréis asco de vosotros mismos por vuestras iniquidades y vuestras detestables acciones.

Ezequiel 6:9

Entonces los supervivientes se acordarán de mí en medio de las naciones donde sean deportados. Yo quebrantaré su corazón adúltero, que se apartó de mí, y sus ojos prostituidos ante sus ídolos. Tendrán horror de sí mismos por las perversidades que cometieron a causa de todas sus horribles acciones.

Zacarías 12:10

Pero entonces infundiré sobre la casa de David y sobre los habitantes de Jerusalén un espíritu de buena voluntad y de súplica. Volverán sus ojos hacia el que traspasaron con la espada y harán luto por él como por un hijo único. Y llorarán por Jerusalén como se llora por el primogénito.

Lucas 15:30

¡Ahora llega ese hijo tuyo, que se ha gastado toda su fortuna con malas mujeres, y tú le matas el ternero cebado!

Lucas 18:13

El publicano, por el contrario, se quedó a distancia y no se atrevía ni a levantar sus ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho y decía: Dios mío, ten compasión de mí, que soy un pecador.

Romanos 6:21

¿Qué frutos lograbais entonces? Aquellos de los que ahora os avergonzáis, porque su fin es la muerte.

Deuteronomio 30:2

si de nuevo te vuelves hacia él y le obedeces, tú y tus hijos, con todo tu corazón y toda tu alma, según todo lo que yo te mando hoy,

2 Timoteo 2:25

corregir con dulzura a los adversarios, para ver si Dios les concede el arrepentimiento, llegar al conocimiento de la verdad