Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Jeremías 14:7 - Biblia Martin Nieto

7 Si nuestras iniquidades dan testimonio contra nosotros, actúa, Señor, por el honor de tu nombre. Sí, nuestras rebeldías han sido numerosas, hemos pecado contra ti.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

7 Aunque nuestras iniquidades testifican contra nosotros, oh Jehová, actúa por amor de tu nombre; porque nuestras rebeliones se han multiplicado, contra ti hemos pecado.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

7 La gente dice: «Nuestra maldad nos alcanzó, Señor, pero ayúdanos por el honor de tu propia fama. Nos alejamos de ti y pecamos contra ti una y otra vez.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

7 Aunque nuestras faltas nos acusen, tú, Yavé, haz algo para gloria de tu nombre. En verdad, muchas son nuestras rebeldías, y grande nuestro pecado contra ti.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

7 ¡Aunque nuestras iniquidades testifican contra nosotros, Obra, oh YHVH, por amor de tu Nombre! ¡Ciertamente nuestras apostasías se han multiplicado, Y hemos pecado contra ti!

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

7 Aunque nuestras culpas nos acusen, actúa, Yahveh, por amor a tu nombre. En verdad, nuestras rebeldías son muchas, hemos pecado contra ti.

Féach an chaibidil Cóip




Jeremías 14:7
30 Tagairtí Cros  

¡Oh Señor, Dios de Israel!, gracias a tu justicia hemos podido subsistir como un resto de supervivientes. Nos reconocemos culpables ante ti, somos indignos de estar en tu presencia'.


No a nosotros, Señor, no a nosotros, sino a tu nombre da la gloria, por tu amor y tu fidelidad.


Por el honor de tu nombre, Señor, perdona mis culpas, por muy grandes que sean.


Ayúdanos, oh Dios, salvador nuestro, por la gloria de tu nombre; líbranos, perdona nuestros pecados, por el honor de tu nombre.


Por mí, sólo por mí lo haré; ¿voy a dejar profanar mi nombre? No cederé mi gloria a ningún otro.


Pues son muchos nuestros delitos ante ti, y nuestras iniquidades contra nosotros testifican; sí, presentes tenemos nuestros crímenes y reconocemos nuestras perversidades:


¡Ay, infeliz de mí! ¡Qué desventura! Mi herida es incurable. ¡Y yo que me decía: éste es mi mal, lo podré soportar!


Tus iniquidades te castigan, tus infidelidades te condenan. Date cuenta, comprende qué funesto es y qué amargo abandonar al Señor tu Dios, no tener ya temor de mí, dice el Señor Dios todopoderoso.


¡Acostémonos en nuestra ignominia y nos cubra nuestro oprobio, porque contra el Señor, nuestro Dios, hemos pecado nosotros y nuestros padres desde nuestra juventud hasta el presente y no hemos escuchado la voz del Señor, nuestro Dios!'.


El Señor me dijo en tiempo del rey Josías: ¿Has visto lo que hace la rebelde Israel? Ha subido a todo monte alto, y bajo todo árbol verde se ha prostituido.


Vuestras injusticias han trastornado este orden, vuestros pecados os han privado de estos bienes.


Por eso el león de la selva los asalta, el lobo del desierto los destroza, el leopardo está al acecho ante sus ciudades; todo el que sale fuera es despedazado; porque son muchos sus delitos, abundantes sus rebeldías.


¿Por qué nos estamos sentados? Reuníos, entremos en nuestras ciudades fortificadas para morir allí, porque el Señor nuestro Dios nos entrega a la muerte, nos da a beber agua envenenada por haber pecado contra él.


¿Por qué este pueblo se rebela tercamente? Se aferran al engaño y no quieren arrepentirse.


Sin embargo, cambié otra vez de propósito en honor a mi nombre para que no fuese vilipendiado ante las gentes, en cuya presencia los había hecho salir.


Pero una vez más retiré mi mano y cambié de propósito en honor a mi nombre, para que no fuese vilipendiado ante las gentes, en cuya presencia los había hecho salir.


Pero cambié de propósito en honor a mi nombre, para que no fuese vilipendiado a los ojos de las gentes entre las que ellos se encontraban, porque había prometido sacar a mi pueblo de Egipto ante los ojos de sus habitantes.


La arrogancia de Israel testifica contra él, la iniquidad de Efraín le hace vacilar, y Judá caerá también con ellos.


La arrogancia de Israel testifica contra él, pero no vuelven al Señor, su Dios; a pesar de ello, no le buscan.


Terminaban ellas de comer la hierba de la tierra, cuando yo dije: '¡Señor Dios, perdona, te ruego! ¿Cómo podrá subsistir Jacob, siendo tan pequeño?'.


Soportaré la ira del Señor, ya que he pecado contra él, hasta que él juzgue mi causa y establezca mi derecho. Él me sacará a la luz, y yo contemplaré su justicia.


a fin de que nosotros, los que antes habíamos esperado en Cristo, seamos alabanza de su gloria;


para hacer resplandecer la gracia maravillosa que nos ha concedido por medio de su querido Hijo.


pero pensé en la arrogancia / de los enemigos, / en la falsa interpretación / que ellos harían: / Ha sido nuestra mano poderosa, / y no el Señor, / la que hizo todo esto.


Lo sabrán los cananeos y todos los habitantes de la región, y se unirán contra nosotros para hacer desaparecer nuestro nombre de la tierra. Y entonces, ¿qué harás tú por tu glorioso nombre?'.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí