Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Hechos 5:36 - Biblia Martin Nieto

36 Porque no hace mucho se alzó Teudas diciendo que él era alguien, y le siguieron unos cuatrocientos hombres; pero lo mataron, todos sus seguidores se dispersaron y de aquello ya no queda nada.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

36 Porque antes de estos días se levantó Teudas, diciendo que era alguien. A este se unió un número como de cuatrocientos hombres; pero él fue muerto, y todos los que le obedecían fueron dispersados y reducidos a nada.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

36 Hace algún tiempo, hubo un tal Teudas, quien fingía ser alguien importante. Unas cuatrocientas personas se le unieron, pero a él lo mataron y todos sus seguidores se fueron cada cual por su camino. Todo el movimiento se redujo a nada.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

36 Recuerden que tiempo atrás se presentó un tal Teudas, que pretendía ser un gran personaje y al que se le unieron unos cuatrocientos hombres. Más tarde pereció, sus seguidores se dispersaron y todo quedó en nada.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

36 Porque antes de estos días se levantó Teudas, diciendo que era alguien;° al cual se unió un número como de cuatrocientos hombres; pero fue muerto, y todos los que le obedecían fueron dispersados y reducidos a nada.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

36 Porque hace tiempo apareció Teudas, haciéndose pasar por un personaje, y se le unieron alrededor de cuatrocientos hombres. Él fue muerto, y todos sus adeptos se dispersaron y fueron reducidos a la nada.

Féach an chaibidil Cóip




Hechos 5:36
14 Tagairtí Cros  

Surgirán falsos mesías y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios para engañar, si fuera posible, aun a los mismos elegidos.


Si os dicen que está en el desierto, no salgáis; si en un escondite, no lo creáis.


Muchos vendrán en mi nombre diciendo: Yo soy el mesías, y engañarán a muchos.


¿Es que no eres tú el egipcio que hace unos días amotinó a cuatro mil guerrilleros y se fue al desierto con ellos?'.


'Israelitas, mirad bien lo que vais a hacer con estos hombres.


Hacía tiempo que venía practicando la magia en la ciudad un tal Simón, que tenía asombrada a la gente de Samaría, diciendo que él era algo grande.


Los dirigentes no me añadieron nada -lo que ellos fueron antes, no me interesa, pues Dios no juzga por las apariencias-,


Porque si alguno se imagina ser algo, siendo así que es nada, se engaña a sí mismo.


Con sus discursos pomposos y vacíos despiertan los deseos carnales y el desenfreno de aquellos que apenas habían logrado escapar de los que viven en el error.


Muchos los seguirán en sus desvergüenzas, y por su causa será maldecido el camino de la verdad.


Son murmuradores, descontentos, que viven conforme a sus pasiones; su boca profiere fanfarronadas, adulando a las personas con vistas a su propio interés.


Y me transportó en espíritu a un desierto. Y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata, llena de nombres blasfemos, con siete cabezas y diez cuernos.


sobre su frente, un nombre escrito -un misterio-: 'Babilonia la grande, la madre de las prostitutas y de las monstruosidades de la tierra'.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí