Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Gálatas 6:14 - Biblia Martin Nieto

14 Yo, por mi parte, sólo quiero presumir de la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por la cual el mundo está crucificado para mí y yo para el mundo.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

14 Pero lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

14 En cuanto a mí, que nunca me jacte de otra cosa que no sea la cruz de nuestro Señor Jesucristo. Debido a esa cruz, mi interés por este mundo fue crucificado y el interés del mundo por mí también ha muerto.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

14 En cuanto a mí, no quiero sentirme orgulloso más que de la cruz de Cristo Jesús, nuestro Señor. Por él el mundo ha sido crucificado para mí y yo para el mundo.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

14 Pero jamás me suceda gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesús, el Mesías, por medio de la cual el mundo ha sido crucificado para mí, y yo para el mundo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 Pero, en cuanto a mí, ¡líbreme Dios de gloriarme en otra cosa que no sea la cruz de nuestro Señor Jesucristo, mediante la cual el mundo fue crucificado para mí y yo para el mundo!

Féach an chaibidil Cóip




Gálatas 6:14
37 Tagairtí Cros  

¿Por qué voy a temer en días aciagos, cuando me acorralan los explotadores,


Al maestro de coro. Maskil de David


'Hijo de hombre, di al príncipe de Tiro: Esto dice el Señor Dios: Tu corazón se ha enorgullecido y has dicho: Un dios soy yo, en la morada de un dios habito, en medio del mar. Tú, que eres un hombre y no un dios, has equiparado tu corazón al corazón de Dios.


Irá, acabará con los viñadores y dará la viña a otros'. Al oír esto dijeron: '¡No lo quiera Dios!'.


Yo no me avergüenzo del evangelio, que es poder de Dios para la salvación de todo el que cree, del judío primero y también del griego.


¡Nunca jamás! Los que hemos muerto al pecado, ¿cómo vamos a seguir viviendo en él?


Sabemos que nuestro hombre viejo ha sido crucificado con él para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que ya no seamos esclavos del pecado;


pero nosotros anunciamos a Cristo crucificado, escándalo para los judíos y locura para los paganos,


Por esto, queridos hermanos, manteneos firmes, inconmovibles, trabajando más y más en la obra del Señor, sabiendo que el Señor no dejará sin recompensa vuestro trabajo.


pues nunca entre vosotros me precié de saber otra cosa que a Jesucristo, y a Jesucristo crucificado.


Por tanto, que nadie presuma de los que son sólo hombres, pues todo es para vosotros:


Y lo que hago, lo seguiré haciendo, para cortar todo pretexto a los que buscan ocasión para presumir de ser como yo.


que se entregó a sí mismo por nuestros pecados para sacarnos de este mundo perverso, conforme a la voluntad de nuestro Dios y Padre,


Pero si buscando ser justificados por Cristo resulta que somos pecadores, ¿será acaso Cristo ministro del pecado? De ninguna manera.


Pues yo, por la ley, he muerto a la ley, a fin de vivir para Dios. Estoy crucificado con Cristo;


y ya no vivo yo, pues es Cristo el que vive en mí. Mi vida presente la vivo en la fe en el Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.


La ley, por tanto, ¿está contra las promesas de Dios? De ninguna manera. Si se hubiera dado una ley capaz de vivificar, entonces la justicia hubiera sido realmente por la ley.


Los que son de Cristo Jesús han crucificado la carne con sus pasiones y concupiscencias.


Pues hay muchos entre vosotros, de quienes muchas veces os dije, y ahora tengo que repetirlo con lágrimas en los ojos, que son enemigos de la cruz de Cristo;


La verdadera circuncisión somos nosotros, los que damos culto llevados del Espíritu de Dios y estamos orgullosos de Cristo Jesús, no poniendo nuestra confianza en algo humano,


Si habéis muerto con Cristo a los elementos del mundo, ¿por qué os sometéis como si todavía fueseis del mundo a preceptos como:


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí