Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Éxodo 40:34 - Biblia Martin Nieto

34 Entonces la nube cubrió la tienda de la reunión, y la gloria del Señor llenó el tabernáculo.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

34 Entonces una nube cubrió el tabernáculo de reunión, y la gloria de Jehová llenó el tabernáculo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

34 Entonces la nube cubrió el tabernáculo, y la gloria del Señor llenó el tabernáculo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

34 Entonces la Nube vino a cubrir la Tienda de las Citas y la Gloria de Yavé llenó la Morada.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

34 Entonces la nube cubrió la Tienda de Reunión, y la gloria de YHVH llenó el Tabernáculo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

34 Entonces la nube cubrió la tienda del encuentro y la gloria de Yahveh llenó el santuario,

Féach an chaibidil Cóip




Éxodo 40:34
28 Tagairtí Cros  

Yo no he habitado en casa desde el día en que saqué de Egipto a los israelitas hasta hoy, sino que he estado peregrinando en una tienda de campaña.


Todos, como un solo hombre, trompeteros y cantores, alababan y daban gracias al Señor. Y al son de las trompetas, címbalos y demás instrumentos musicales alababan al Señor: 'Porque es bueno, porque es eterno su amor'. Una nube llenó el templo del Señor,


de manera que los sacerdotes no podían entrar en él, pues la gloria del Señor lo llenaba.


Señor, yo amo la casa donde tú resides, el lugar donde tu gloria habita.


Antes de la madrugada, el Señor miró desde la columna de fuego y de nube a las huestes egipcias y las desbarató.


Mientras Aarón estaba hablando, miraron hacia el desierto, y vieron aparecer la gloria del Señor en la nube.


Me harán un santuario y habitaré en medio de ellos.


En este lugar yo me encontraré con los israelitas, y quedará santificado por mi gloria.


Cuando Moisés entraba en la tienda, la columna de nube bajaba y se paraba a la entrada de la tienda, y el Señor hablaba con Moisés.


Pues esto dice el altísimo, el excelso, el que habita una morada eterna y cuyo nombre es santo: Yo habito en una morada excelsa y santa, pero también estoy con el hombre arrepentido y humilde, para reanimar el espíritu de los humildes, para reconfortar el corazón afligido.


Las jambas del dintel retemblaban por la voz de los que gritaban, y el templo se llenó de humo.


Después la gloria del Señor se elevó de encima del querubín hacia el umbral del templo, el cual se llenó de la nube, y el atrio quedó inundado del esplendor de la gloria del Señor.


y le dijo: 'Di a tu hermano Aarón que no podrá entrar nunca en el santuario, en el recinto que hay detrás del velo, en presencia del propiciatorio que está sobre el arca, no sea que muera cuando yo aparezca sobre el propiciatorio en una nube.


Haré temblar a todas las naciones para que traigan los tesoros de todas las gentes, y colmaré de gloria esta casa, dice el Señor todopoderoso.


La gloria de esta casa última será mayor que la de la primera, dice el Señor todopoderoso; y en este lugar daré la paz, dice el Señor todopoderoso'.


Cuando Moisés entraba en la tienda de la reunión para hablar con el Señor, oía la voz que le hablaba desde lo alto del propiciatorio, que está sobre el arca de la alianza, entre los querubines. Así le hablaba el Señor.


son los israelitas, a los que Dios adoptó como hijos y a los que se apareció gloriosamente; de ellos es la alianza, la ley, el culto y las promesas;


El templo se llenó del humo que salía de la gloria de Dios y de su poder. Nadie podía entrar en el templo hasta la consumación de las siete plagas de los siete ángeles.


Y oí venir del trono una voz potente que decía: 'Ésta es la morada de Dios con los hombres; él habitará con ellos, ellos serán su pueblo


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí