Ester 8:8 - Biblia Martin Nieto8 Escribid, pues, a los judíos como mejor os parezca en nombre del rey y selladlo con el sello del rey, pues un documento expedido en nombre del rey y sellado con su anillo es irrevocable'. Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 19608 Escribid, pues, vosotros a los judíos como bien os pareciere, en nombre del rey, y selladlo con el anillo del rey; porque un edicto que se escribe en nombre del rey, y se sella con el anillo del rey, no puede ser revocado. Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente8 Ahora envíen un mensaje a los judíos en nombre del rey, que exprese lo que ustedes quieran, y séllenlo con el anillo del rey. Sin embargo, recuerden que todo lo que ya se ha escrito en nombre del rey y lo que se ha sellado con su anillo jamás puede ser revocado. Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)8 Escriban pues respecto a los judíos, en nombre del rey, como lo estimen conveniente, y pongan el sello del anillo real, porque no puede ser anulada una carta en nombre del rey y sellada con el anillo real». Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion8 Ahora pues, escribid en nombre del rey respecto a los judíos lo que bien os parezca, y selladlo con el sello del rey , porque lo° que es escrito en nombre del rey y sellado con el sello del rey no puede ser revocado. Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 19758 Escribid vosotros mismos sobre el asunto de los judíos como bien os parezca, en nombre del rey, y selladlo con el anillo real; pues documento escrito en nombre del rey y sellado con el anillo real no puede ser revocado'. Féach an chaibidil |
El trece del primer mes, el de nisán, fueron convocados los secretarios del rey para sacar copias de las órdenes reales y mandarlas a todos los sátrapas del rey, a los gobernadores de las provincias y a los jefes de cada pueblo, según la escritura de cada provincia y la lengua de cada pueblo. Las copias fueron firmadas en nombre del rey Asuero y selladas con su anillo real.
Todos los jefes del reino, prefectos y sátrapas, ministros y gobernadores, han llegado a la conclusión de que debe promulgarse el siguiente decreto real que tenga valor de ley: Todo el que en el espacio de treinta días dirija una oración a cualquier dios u hombre, fuera de ti, oh rey, será arrojado en el foso de los leones.