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Amós 4:6 - Biblia Martin Nieto

6 Yo no os dejé nada que llevar a la boca en todas vuestras ciudades, os dejé sin pan en todos vuestros lugares, ¡y no habéis vuelto a mí!, dice el Señor.

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Biblia Reina Valera 1960

6 Os hice estar a diente limpio en todas vuestras ciudades, y hubo falta de pan en todos vuestros pueblos; mas no os volvisteis a mí, dice Jehová.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 «Hice que pasaran hambre en cada ciudad y que hubiera hambruna en cada pueblo, pero aun así, ustedes no se volvieron a mí», dice el Señor.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Yo dejé sus dientes limpios por no tener qué masticar e hice que faltara el pan en todas sus ciudades, pero ustedes no se han vuelto a mí, palabra de Yavé.

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 Aunque os dejé con los dientes limpios° en todas vuestras ciudades, Y faltos de pan en todas vuestras aldeas, No os volvisteis a mí, dice YHVH.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Os he hecho estar con dientes limpios en vuestras ciudades, faltos de pan en vuestros lugares. Pero no habéis vuelto a mí -oráculo de Yahveh-.

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Amós 4:6
31 Tagairtí Cros  

Elías, el tesbita, de Tisbé, en Galaad, dijo a Ajab: '¡Vive el Señor, Dios de Israel, a cuyo servicio estoy!: en estos dos años no habrá lluvia ni rocío, mientras yo no lo diga'.


Elías fue a presentarse a Ajab. Como el hambre arreciaba en Samaría,


Eliseo regresó a Guilgal. En el país había carestía. Y estando un día con él los discípulos de los profetas, dijo a su siervo: 'Pon la olla grande y cuece unas viandas para los discípulos de los profetas'.


Eliseo dijo a la mujer cuyo hijo había resucitado: 'Levántate y vete con tu familia a fijar tu residencia dondequiera que sea, porque el Señor ha llamado al hambre, que penetrará en el país durante siete años'.


Mientras estaba asediado, el rey Acaz aumentó sus pecados contra el Señor.


Señor, alzada está tu mano; pero ellos no la miran. ¡Vean tu celo por tu pueblo, y se avergüencen, y el fuego preparado para tus enemigos los devore!


Sí, el Señor Dios todopoderoso quitará a Jerusalén y a Judá todo apoyo y sostén, todo sostén de pan, todo sostén de agua:


Pero el pueblo no ha vuelto hacia aquel que le hiere; no ha buscado al Señor omnipotente.


Por eso el Señor cortó a Israel cabeza y cola, palmera y junco en sólo un día:


Si salgo al campo, sólo veo caídos a espada; si entro en la ciudad, allí están las angustias del hambre. Hasta los profetas y los sacerdotes vagan por el país. ¡Ya no lo conocen!


¡Oh Señor!, ¿no buscan tus ojos la verdad? Tú les has herido, y no han acusado el golpe; los has aplastado, y no han querido aprender la lección. Han endurecido su frente como la roca, han rehusado convertirse.


Esto dice el Señor Dios: 'Cuando yo mande contra Jerusalén estos cuatro azotes: espada, hambre, animales feroces y peste para exterminar de ella hombres y animales,


Entonces yo extendí mi mano contra ti, reduje tu ración y te abandoné a merced de tus enemigas, las hijas de los filisteos, que se avergonzaban de tu conducta descarada.


Se volverán a Egipto, pero asirio será su rey porque no han querido convertirse.


Sí, volveré a mi lugar hasta que se sientan culpables y busquen mi rostro. En su angustia me buscarán.


¿No veis cómo falta la comida, la alegría y el júbilo de la casa de nuestro Dios?


Si a pesar de ello no os corregís y seguís obstinados contra mí,


Cuando yo retire el sustento de pan, diez mujeres bastarán para cocer el pan en un solo horno y os lo darán tasado, de manera que comeréis y no quedaréis satisfechos.


Yo herí con tizón, añublo y granizo todas vuestras labores, y sin embargo no volvisteis a mí, palabra del Señor.


Sembrarás mucho, pero cosecharás poco, porque la langosta lo devorará.


Ya le he dado tiempo para que se arrepienta, pero ella no quiere convertirse de su lujuria.


En los días en que gobernaban los jueces hubo una gran carestía en Palestina, y un hombre de Belén de Judá emigró al país de Moab con su mujer y sus dos hijos.


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