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2 Timoteo 1:13 - Biblia Martin Nieto

13 Conserva como modelo de sana doctrina lo que oíste de mí, con la fe y el amor de Cristo Jesús.

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Biblia Reina Valera 1960

13 Retén la forma de las sanas palabras que de mí oíste, en la fe y amor que es en Cristo Jesús.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

13 Aférrate al modelo de la sana enseñanza que aprendiste de mí, un modelo formado por la fe y el amor que tienes en Cristo Jesús.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

13 Toma como norma la sana doctrina que has oído de mí sobre la fe y el amor según Cristo Jesús.

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La Biblia Textual 3a Edicion

13 Retén el modelo° de las sanas palabras que oíste de mí, con la fe y el amor que hay en Jesús el Mesías.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

13 Ten por modelo las saludables palabras que escuchaste de mí, con la fe y el amor en Cristo Jesús.

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2 Timoteo 1:13
30 Tagairtí Cros  

Hazte con la verdad y no la vendas; con la sabiduría, la instrucción y la inteligencia.


Es un árbol de vida para los que la abrazan, y los que la poseen son bienaventurados.


Hijo mío, guarda el consejo y la prudencia; no se aparten de tus ojos;


Mantén la disciplina, no la dejes; guárdala porque ella es tu vida.


A mí me pertenece el consejo y la previsión; mía es la inteligencia, mía la fuerza.


educador de ignorantes, maestro de niños por tener en la ley la norma de la ciencia y de la verdad;


Pero gracias a Dios vosotros, después de haber sido esclavos del pecado, habéis obedecido de todo corazón a la norma de doctrina en la cual habéis sido instruidos;


Os pido sobre todo que viváis una vida digna del evangelio de Cristo para que, sea que vaya y lo vea, sea que ausente lo oiga, perseveréis firmes en un mismo espíritu, luchando con una sola alma por la fe del evangelio,


practicad lo que habéis aprendido y recibido, lo que habéis oído y visto en mí, y el Dios de la paz estará con vosotros.


porque estamos informados de vuestra fe en Cristo Jesús y del amor fraterno que tenéis a todos los creyentes


Examinadlo todo, y quedaos con lo bueno.


los lujuriosos, los homosexuales, los traficantes de esclavos, los mentirosos, los que juran en falso; en una palabra, para todo el que se opone a la sana doctrina


la gracia de nuestro Señor me colmó de fe y de amor cristiano.


Si alguno enseña cosas distintas y no admite la enseñanza salvadora de nuestro Señor Jesucristo y la doctrina de nuestra religión,


Pablo, apóstol de Cristo Jesús por voluntad de Dios para anunciar la promesa de la vida que tenemos en Cristo Jesús,


Guarda este preciado depósito con la ayuda del Espíritu Santo, que habita en nosotros.


y las cosas que me oíste a mí ante muchos testigos, confíalas a hombres leales, capaces de enseñárselas a otros.


Tú, en cambio, permanece fiel en lo que has aprendido y de lo que estás convencido. Conoces bien a tus maestros.


Pues vendrá el tiempo en que los hombres no soportarán la sana doctrina, sino que, llevados de sus caprichos, buscarán maestros que les halaguen el oído;


guardador fiel de la doctrina que se le enseñó, para que sea capaz de animar a otros y de refutar a los que contradicen.


Tú, en cambio, predica lo que está conforme con la sana doctrina.


de palabra sana, irreprochable, de modo que el adversario quede en vergüenza al no poder alegar contra nosotros nada malo.


Mantengamos firmemente la esperanza que profesamos, pues el que ha prometido es fiel;


Cristo, por el contrario, lo ha sido en calidad de Hijo, al frente de su casa. Y su casa somos nosotros, con tal que permanezcamos inquebrantables hasta el fin, confesando valientemente nuestra fe y confiados en la esperanza que tenemos.


Puesto que tenemos un sumo sacerdote extraordinario, que ha penetrado en los cielos, Jesús, el Hijo de Dios, permanezcamos firmes en la fe que profesamos.


Queridísimos, tenía un gran deseo de escribiros acerca de nuestra común salvación, y me he visto obligado a hacerlo para exhortaros a luchar por la fe, que de una vez para siempre ha sido transmitida a los creyentes.


únicamente permaneced fieles a la fe que tenéis hasta que yo vaya.


Mi venida está próxima; guarda bien lo que tienes, para que nadie te quite tu corona.


Acuérdate de cómo recibiste y oíste la palabra; guárdala y arrepiéntete. Porque, si no despiertas, caeré sobre ti como un ladrón, sin que sepas a qué hora te voy a sorprender.


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