2 Samuel 3:28 - Biblia Martin Nieto

²⁸ Cuando David supo lo que había pasado, dijo: 'Yo y mi reino somos inocentes por siempre ante el Señor de la sangre de Abner, hijo de Ner.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

²⁸ Cuando David supo después esto, dijo: Inocente soy yo y mi reino, delante de Jehová, para siempre, de la sangre de Abner hijo de Ner.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁸ Cuando David se enteró, declaró: «Juro por el Señor que yo y mi reino somos inocentes para siempre de este crimen cometido contra Abner, hijo de Ner.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁸ David sólo supo después lo sucedido. Exclamó: 'Yo y mi reino seremos para siempre inocentes ante Yavé de la sangre de Abner, hijo de Ner.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁸ Cuando después David lo supo, dijo: ¡Yo y mi reino somos inocentes ante YHVH por siempre de la copiosa sangre de Abner ben Ner!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁸ Cuando luego lo supo David, exclamó: 'Yo y mi reino somos inocentes ante Yahveh, para siempre, de la sangre de Abner hijo de Ner.

2 Samuel 3:28 Tagairtí Cros

Génesis 4:10

El Señor le dijo: '¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano grita de la tierra hasta mí.

Génesis 9:6

Quien derrame sangre de hombre verá la suya derramada por el hombre, porque Dios ha hecho al hombre a su imagen.

2 Samuel 1:16

David le dijo: '¡Que tu sangre caiga sobre tu cabeza!, porque tu boca ha dado testimonio contra ti, diciendo: Yo he matado al ungido del Señor'.

2 Samuel 16:8

El Señor ha hecho caer sobre ti toda la sangre de la casa de Saúl, a quien has usurpado el trono, y ha puesto el trono en manos de Absalón, tu hijo. Tú estás en la desgracia que mereces, porque eres un hombre sanguinario'.

2 Samuel 3:27

Cuando Abner volvió a Hebrón, Joab le llevó aparte, al lado de la puerta, como para hablar pacíficamente con él, y allí le hirió mortalmente en el vientre, por la sangre de Asael, su hermano.

2 Samuel 3:29

Que caiga sobre la cabeza de Joab y de toda su familia y que no falte nunca en la casa de Joab quien padezca gonorrea o lepra, hombres que anden con bastón, que caigan bajo la espada o que pasen hambre'.

Éxodo 21:12

El que hiere de muerte a un hombre, será condenado a muerte.

Números 35:33

No profanaréis la tierra que habitáis, porque la sangre profana la tierra, y la tierra no puede ser purificada de la sangre vertida sobre ella, sino con la sangre del que la ha vertido.

Mateo 27:24

Viendo Pilato que nada conseguía, sino que aumentaba el alboroto, mandó que le trajeran agua y se lavó las manos ante el pueblo, diciendo: 'Soy inocente de esta sangre. ¡Vosotros veréis!'.