Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





1 Samuel 12:22 - Biblia Martin Nieto

22 El Señor no rechazará a su pueblo por la gloria de su gran nombre, porque el Señor se ha dignado hacer de vosotros su pueblo.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

22 Pues Jehová no desamparará a su pueblo, por su grande nombre; porque Jehová ha querido haceros pueblo suyo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

22 El Señor no abandonará a su pueblo, porque eso traería deshonra a su gran nombre. Pues le agradó al Señor hacerlos su pueblo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

22 Pero Yavé no abandonará a su pueblo porque sería desacreditar a su nombre, después de lo que ha hecho por su propio pueblo.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

22 Porque YHVH no abandonará a su pueblo, debido a su gran Nombre; pues YHVH ha querido haceros pueblo suyo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

22 Y Yahveh por amor de su gran nombre, no abandonará a su pueblo pues ha querido hacer de vosotros su pueblo.

Féach an chaibidil Cóip




1 Samuel 12:22
49 Tagairtí Cros  

Habitaré en medio de los israelitas y no abandonaré a mi pueblo, Israel'.


Que el Señor, nuestro Dios, esté con nosotros, como lo estuvo con nuestros padres; que no nos deje ni nos abandone,


Y como el Señor no había decretado borrar el nombre de Israel de debajo del cielo, le salvó por medio de Jeroboán, hijo de Joás.


Rechazaré el resto de mi heredad y lo entregaré en manos de sus enemigos, para que sean botín y despojo de sus adversarios;


Y tú, Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre, sírvele con todo tu corazón, con ánimo bien dispuesto, porque el Señor escudriña los corazones de todos y penetra sus más secretos pensamientos. Si tú lo buscas, él se dejará encontrar; pero si tú lo abandonas, él se retirará para siempre.


salió al encuentro de Asá y le dijo: 'Óyeme, Asá, y escuchadme todos los de Judá y Benjamín. El Señor está con vosotros porque vosotros estáis con él. Cuando vosotros le buscáis, él se deja encontrar por vosotros; pero si lo abandonáis, él se aleja.


No quisieron obedecer, olvidándose de las maravillas que tú habías realizado para ellos. Endurecieron su cabeza y se empeñaron, obstinados, en volver a Egipto, a su esclavitud. Pero tú eres un Dios pronto a perdonar, clemente y misericordioso, tardo a la ira y lleno de bondad; por eso no los abandonaste.


Pero él los salvó por amor a su nombre, para manifestar públicamente su poder.


Pues el Señor no dejará a su pueblo ni abandonará a su heredad;


¿Por qué van a poder decir los egipcios: Con muy mala intención los hizo salir, para hacerlos perecer en las montañas y exterminarlos de la superficie de la tierra? Aplaca tu ira y arrepiéntete de la amenaza contra tu pueblo.


Yo defenderé esta ciudad y la salvaré, en atención a mí y a mi siervo David.


Los humillados y los pobres buscan agua y no la hay; su lengua de sed está reseca. Yo, el Dios de Israel, no los abandonaré.


Guiaré a los ciegos por caminos que no conocen, por senderos ignorados los haré caminar; ante ellos cambiaré las tinieblas en luz, y en llano el terreno pedregoso. Todo esto es lo que voy a hacer y lo haré sin falta.


Soy yo, soy yo, quien tengo que borrar tus faltas y no acordarme de tus pecados.


a todos aquellos que llevan mi nombre, a quienes yo crié para mi gloria, a quienes formé y preparé.


Por mí, sólo por mí lo haré; ¿voy a dejar profanar mi nombre? No cederé mi gloria a ningún otro.


¿Puede acaso una mujer olvidarse del niño que cría, no tener compasión del hijo de sus entrañas? Pues aunque ella lo olvidara, yo no me olvidaría de ti.


Él había dicho: Realmente son mi pueblo, hijos que no serán traidores. Y fue su salvador


¡No nos deseches, por amor de tu nombre! ¡No desprecies tu trono glorioso! ¡Acuérdate, no rompas tu alianza con nosotros!


Si nuestras iniquidades dan testimonio contra nosotros, actúa, Señor, por el honor de tu nombre. Sí, nuestras rebeldías han sido numerosas, hemos pecado contra ti.


¿Por qué eres como un hombre deprimido, como un guerrero incapaz de salvar? Pero tú estás en medio de nosotros, oh Señor, y nosotros llevamos tu nombre. ¡No nos desampares!


¿Por qué nos vas a olvidar para siempre, por qué abandonarnos por tanto tiempo?


Sin embargo, cambié otra vez de propósito en honor a mi nombre para que no fuese vilipendiado ante las gentes, en cuya presencia los había hecho salir.


Pero cambié de propósito en honor a mi nombre, para que no fuese vilipendiado a los ojos de las gentes entre las que ellos se encontraban, porque había prometido sacar a mi pueblo de Egipto ante los ojos de sus habitantes.


'Yo os amo', dice el Señor; y vosotros decís: '¿Cómo que nos amas?'. '¿No era acaso Esaú hermano de Jacob? -dice el Señor-. Sin embargo, yo amé a Jacob


Sí, Padre, porque así lo has querido.


No me elegisteis vosotros a mí, sino yo a vosotros; y os designé para que vayáis y deis fruto y vuestro fruto permanezca, a fin de que todo lo que pidáis al Padre en mi nombre os lo conceda.


Yo pregunto: ¿Es que Dios ha rechazado a su pueblo? De ninguna manera. Porque también yo soy israelita, de la descendencia de Abrahán, de la tribu de Benjamín.


porque los dones y el llamamiento de Dios son irrevocables.


Pues ¿quién te hace a ti superior? Y ¿qué tienes que no hayas recibido? Y si lo has recibido, ¿por qué presumes como si no lo hubieras recibido?


a fin de que nosotros, los que antes habíamos esperado en Cristo, seamos alabanza de su gloria;


para hacer resplandecer la gracia maravillosa que nos ha concedido por medio de su querido Hijo.


Porque tú eres un pueblo consagrado al Señor, tu Dios, y el Señor te ha elegido para ser su pueblo entre todos los pueblos de la tierra.


Pero aquel día montaré en cólera contra él, lo abandonaré y me esconderé de él. Un cúmulo de males y desgracias lo asaltará para devorarlo. Entonces dirá: Mi Dios ya no está conmigo; por eso me ocurren estas desgracias.


Sed fuertes y tened ánimo; no las temáis ni os asustéis, pues el Señor, tu Dios, va contigo; él no te dejará ni te abandonará'.


El Señor irá delante de ti; él estará contigo, no te dejará ni te abandonará; no temas ni te desanimes'.


Porque tú eres un pueblo consagrado al Señor, tu Dios. El Señor, tu Dios, te ha elegido para pueblo suyo entre todos los pueblos que hay sobre la tierra.


No por tu justicia ni por la rectitud de tu corazón vas a entrar en posesión de la tierra, sino por la injusticia de esas naciones las echa el Señor lejos de ti; y también para cumplir el juramento hecho a vuestros padres Abrahán, Isaac y Jacob.


persuadido de que quien comenzó en vosotros la buena obra la llevará a feliz término para el día de Cristo Jesús.


Que la avaricia no se apodere de vosotros. Contentaos con lo que tenéis, porque Dios mismo ha dicho:


Lo sabrán los cananeos y todos los habitantes de la región, y se unirán contra nosotros para hacer desaparecer nuestro nombre de la tierra. Y entonces, ¿qué harás tú por tu glorioso nombre?'.


Vosotros, por el contrario, sois linaje escogido, sacerdocio real, nación consagrada, pueblo de su propiedad, para anunciar las grandezas del que os ha llamado de las tinieblas a su luz maravillosa,


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí