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Jeremías 18:11 - Nueva Biblia Española (1975)

11 Y ahora habla a los judíos y a los vecinos de Jerusalén: Así dice el Señor: Yo, el alfarero, les preparo un castigo y medito un plan contra ustedes. Que se convierta cada cual de su mala conducta, enmienden su conducta y sus acciones.

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Biblia Reina Valera 1960

11 Ahora, pues, habla luego a todo hombre de Judá y a los moradores de Jerusalén, diciendo: Así ha dicho Jehová: He aquí que yo dispongo mal contra vosotros, y trazo contra vosotros designios; conviértase ahora cada uno de su mal camino, y mejore sus caminos y sus obras.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

11 »Por lo tanto, Jeremías, advierte a todo Judá y a Jerusalén y diles: “Esto dice el Señor: ‘En vez de algo bueno, les tengo preparado un desastre. Así que cada uno de ustedes abandone sus malos caminos y haga lo correcto’”».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

11 Pues bien, oigan lo que dice Yavé a la gente de Judá y a los habitantes de Jerusalén: Sepan que yo estoy preparando contra ustedes una desgracia. Arrepiéntanse cada uno de su mal proceder, y mejoren su conducta y sus obras.

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La Biblia Textual 3a Edicion

11 Ahora pues, habla a los hombres de Judá y a los habitantes de Jerusalem, y diles: Así dice YHVH: He aquí, Yo doy forma° a un mal contra vosotros, y tramo un diseño contra vosotros. Volveos pues cada uno de su mal camino, y mejorad vuestros caminos y vuestras obras.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

11 Ahora, pues, habla a los hombres de Judá y a los habitantes de Jerusalén en estos términos: Así dice Yahveh: 'Mirad: estoy preparando contra vosotros un mal y planeando contra vosotros un plan. Convertíos, pues, cada uno de su mala conducta, y enmendad vuestro proceder y vuestras obras'.

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Jeremías 18:11
40 Tagairtí Cros  

Vamos a bajar y a confundir su lengua, de modo que uno no entienda la lengua del prójimo.


Como ves, el Señor ha puesto oráculos falsos en la boca de todos esos profetas tuyos, porque el Señor ha decretado tu ruina.


El Señor había advertido a Israel (y Judá) por medio de los profetas y videntes: 'Vuélvanse de su mal camino, guarden mis mandatos y preceptos, siguiendo la ley que di a sus padres, que les comuniqué por medio de mis siervos los profetas'.


Vayan a consultar al Señor por mí y por el pueblo y todo Judá a propósito de este libro que han encontrado; porque el Señor estará enfurecido contra nosotros, porque nuestros padres no obedecieron los mandatos de este libro cumpliendo lo prescrito en él.


El rey de Siria le dijo: Ven, que te doy una carta para el rey de Israel. Naamán se puso en camino, llevando tres quintales de plata, seis mil monedas de oro y diez trajes.


Pues ahora les diré a ustedes lo que voy a hacer con mi viña: quitar su valla para que sirva de pasto, derruir su cerca para que la pisoteen.


Perece el inocente, y nadie hace caso; se llevan a los hombres fieles, y nadie comprende que ante la maldad se llevan al inocente,


Por eso, así dice el Señor: Yo les enviaré una calamidad que no podrán rehuir; me gritarán y no los oiré.


Yo, como cordero manso llevado al matadero, no sabía los planes homicidas que tramaban contra mí: 'Cortemos el árbol en su lozanía, arranquémoslo de la tierra de los vivos, que su nombre no se pronuncie más'.


Dijeron: Vamos a tramar un plan contra Jeremías, que no nos faltará la instrucción de un sacerdote, el consejo de un docto, el oráculo de un profeta; vamos a herirlo en la lengua, no hagamos caso de lo que dice.


Así dice el Señor de los ejércitos, Dios de Israel: Yo haré venir sobre esta ciudad y su comarca todos los males con que la he amenazado, porque se pusieron tercos y no escucharon mis palabras.


Di: Escuchen la palabra del Señor, reyes de Judá y vecinos de Jerusalén: Así dice el Señor de los ejércitos, Dios de Israel: Yo haré venir sobre este lugar una catástrofe que a quien la oiga le zumbarán los oídos;


y el profeta Jeremías se lo comunicó a todos los judíos y a todos los vecinos de Jerusalén:


Los exhortaban: 'Que se convierta cada uno de su mala conducta y de sus malas acciones, y volverá a la tierra que el Señor les entregó a ustedes y a sus padres, desde siempre y para siempre.


Y ahora enmienden su conducta y sus acciones, obedezcan al Señor, su Dios, y el Señor se arrepentirá de las amenazas que ha proferido contra ustedes.


A ver si se convierte cada uno de su mala conducta y yo puedo arrepentirme del castigo que preparo contra ellos por sus malas acciones.


Si un hombre repudia a su mujer, ella se separa y se casa con otro, ¿volverá él a ella?, ¿no está esa mujer infamada? Pues tú has fornicado con muchos amantes, ¿podrás volver a mí? -oráculo del Señor- .


Vuelvan, hijos apóstatas, y los curaré de su apostasía. Aquí estamos, hemos venido a ti, porque tú, Señor, eres nuestro Dios.


Sin cesar les envié a mis siervos los profetas a que les dijeran: Que se convierta cada cual de su mala conducta y que enmiende sus acciones; no sigan a dioses extraños, dándoles culto; así habitarán en la tierra que les di a ustedes y a sus padres. Pero no prestaron oído ni me hicieron caso.


A ver si escuchan los judíos las amenazas que pienso ejecutar contra ellos y se convierte cada cual de su mala conducta y puedo perdonar sus crímenes y pecados.


A ver si presentan sus súplicas al Señor y se convierte cada cual de su mala conducta, porque es grande la ira y la cólera con que el Señor amenaza a este pueblo.


Si quieres volver, Israel, vuelve a mí -oráculo del Señor- ; si apartas de mí tus execraciones, no irás errante;


Jerusalén, lava tu corazón de maldades, para salvarte, ¿hasta cuándo anidarán en tu pecho planes criminales?


Miro a la tierra: ¡caos informe!; al cielo: está sin luz;


levanten la bandera hacia Sión; aprisa, no se paren; que yo traigo del norte la desgracia, una gran calamidad:


Afilen las saetas, embracen el escudo, el Señor incita a los jefes medos, porque quiere destruir a Babilonia: es la venganza del Señor, la venganza de su templo.


así dice el Señor de los ejércitos, Dios de Israel: Enmienden su conducta y sus acciones, y habitaré con ustedes en este lugar;


Porque han afligido con embustes al justo, sin que yo lo afligiera, porque han dado apoyo al malvado, para que no se convirtiera de su mala conducta y pudiera conservar la vida;


¿Acaso quiero yo la muerte del malvado -oráculo del Señor- y no que se convierta de su conducta y que viva?


cúbranse de sayal hombres y animales. Invoquen fervientemente a Dios; que cada cual se convierta de su mala vida y de sus acciones violentas.


Por eso así dice el Señor: Miren, yo planeo una desgracia contra esa gente, de la que no podrán apartar el cuello, ni podrán caminar erguidos, porque es una hora funesta.


Ahora diles: Así dice el Señor de los ejércitos: Vuelvan a mí -oráculo del Señor- de los ejércítos y yo volveré a ustedes -dice el Señor de los ejércitos-.


Al contrario, primero a los de Damasco, pero además a los de Jerusalén y de toda la comarca de Judea, y luego a los paganos, les he predicado que se arrepientan y que se conviertan a Dios, portándose como corresponde al arrepentimiento.


Vamos ahora con los que dicen: 'Hoy mismo o mañana salimos para tal o cual ciudad, nos pasamos allí un año negociando, y ¡a ganar dinero!'.


Vamos ahora con los ricos: lloren a gritos por las desgracias qUe se les vienen encima.


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