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Apocalipsis 11:13 - Nueva Biblia Española (1975)

13 En aquel momento se produjo un gran terremoto y se desplomó la décima parte de la ciudad; murieron en el terremoto siete mil personas, y los demás, aterrorizados, dieron la razónal Dios del cielo.

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Biblia Reina Valera 1960

13 En aquella hora hubo un gran terremoto, y la décima parte de la ciudad se derrumbó, y por el terremoto murieron en número de siete mil hombres; y los demás se aterrorizaron, y dieron gloria al Dios del cielo.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

13 En ese mismo momento, hubo un gran terremoto que destruyó la décima parte de la ciudad. Murieron siete mil personas en el terremoto, y todos los demás quedaron aterrorizados y le dieron la gloria al Dios del cielo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

13 En ese momento se produjo un violento terremoto y se derrumbó la décima parte de la ciudad, pereciendo en el cataclismo siete mil personas. Los supervivientes se llenaron de espanto y reconocieron al Dios del cielo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

13 En aquella hora hubo un gran terremoto,° y la décima parte de la ciudad se derrumbó, y en el terremoto murieron siete mil hombres,° y los demás se llenaron de temor, y dieron gloria al Dios° del cielo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

13 En aquel momento se produjo un gran terremoto; se derrumbó la décima parte de la ciudad y murieron por el terremoto siete mil personas. Los demás quedaron quedaron sobrecogidos de espanto y dieron gloria al Dios del cielo.

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Apocalipsis 11:13
21 Tagairtí Cros  

En aquel tiempo -es decir, cuando los hijos de Dios se unieron a las hijas del hombre y engendraron hijos- habitaban la tierra los gigantes (se trata de los famosos héroes de antaño).


te auxiliará el Señor de los ejércitos con fragor y estruendo de grandes truenos, con huracán y vendaval y rayos abrasadores.


Confiésense ante el Señor, su Dios, antes de que oscurezca, antes de que tropiecen sus pies por los montes a media luz, y convierta en lóbregas tinieblas la luz que esperan.


Si no me obedecen y no se proponen honrarme -dice el Señor de los ejércitos- les enviaré mi maldición; maldeciré sus bendiciones, las maldeciré porque ustedes no hacen caso.


Llamaron entonces por segunda vez al hombre que había sido ciego y le dijeron: Reconócelo tú ante Dios. A nosotros nos consta que ese hombre es un pecador.


Uno de aquellos días había reunidas unas ciento veinte personas. Pedro se puso de pie en medio de los hermanos y dijo:


Josué le dijo: Hijo mío, glorifica al Señor, Dios de Israel, haciendo tu confesión. Dime lo que has hecho, no me ocultes nada.


Al cabo de los tres días y medio un aliento de vida mandado por Dios entró en ellos y se pusieron en pie; el terror sobrecogió a todos los que lo veían.


Se abrió en el cielo el santuario de Dios y en su santuario apareció el arca de su alianza; se produjeron relámpagos, estampidos, truenos, un terremoto y temporal de granizo.


Clamaba: Respeten a Dios y denle la razón, porque ha sonado la hora de su juicio; rindan homenaje al que hizo el cielo, la tierra, el mar y los manantiales'.


¿Quién no te respetará?, ¿Quién no dará gloria a tu nombre, si sólo tú eres santo? Todas las naciones vendrán a postrarse ante ti, porque tus justas sentencias se han promulgado.


Hagamos fiesta, saltemos de gozo y démosle a él la gloria, porque han llegado las bodas del Cordero; La esposa se ha preparado,


A pesar de todo, tienes ahí en Sardis unos cuantos que no han manchado su ropa; ésos pasearán conmigo vestidos de blanco, pues se lo merecen.


En la visión, cuando se abrió el sexto sello se produjo un gran terremoto, el sol se puso negro como un vestido de pelo, la luna se tiñó de sangre


El ángel tomó entonces el incensario, lo llenó de ascuas del altar y lo arrojó a la tierra: hubo truenos, estampidos, relámpagos y un terremoto.


Hagan unas imágenes de los forúnculos y de las ratas que han asolado el país, y así reconocerán la gloria del Dios de Israel. A ver si el paso de su mano se aparta de ustedes, de su país y de su dios.


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