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Mateo 27:31 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia

Después de burlarse de Él, le quitaron el manto y lo vistieron con su propia ropa y se lo llevaron para crucificarlo.

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Biblia Reina Valera 1960

Después de haberle escarnecido, le quitaron el manto, le pusieron sus vestidos, y le llevaron para crucificarle.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Cuando al fin se cansaron de hacerle burla, le quitaron el manto y volvieron a ponerle su propia ropa. Luego lo llevaron para crucificarlo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Cuando terminaron de burlarse de él, le quitaron la capa de soldado, le pusieron de nuevo sus ropas y lo llevaron a crucificar.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Después de burlarse de Él, le quitaron el manto, le pusieron su ropa, y lo llevaron para crucificarlo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Cuando acabaron las burlas, le quitaron el manto, le pusieron sus propios vestidos y se lo llevaron a crucificarlo.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y después que le hubieron escarnecido, le quitaron el manto, y poniéndole sus vestiduras, le llevaron para crucificarle.

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Mateo 27:31
12 Tagairtí Cros  

y lo entregarán también a los gentiles para que se burlen de Él, lo azoten y lo crucifiquen, pero al tercer día resucitará.


Y lo agarraron, lo llevaron fuera de la viña y lo mataron.


– Ustedes saben que dentro de dos días se celebra la Pascua, y el Hijo del Hombre será entregado para ser crucificado.


Después de haberse cansado de burlarse de Él, le quitaron el manto morado y le vistieron con su propia ropa antes de llevarlo para crucificarlo.


Entonces Pilatos entregó a Jesús a los judíos, con el propósito de que fuera crucificado. Y se lo llevaron.


Después le dijo a su discípulo amado: – ¡Ahí tienes a tu madre! Y en ese momento su discípulo la recibió como parte de los suyos.


Lo sacaron con violencia de la ciudad y empezaron a apedrearlo. Los que lo habían acusado falsamente dejaron sus ropas a los pies de un joven llamado Saulo.


Por lo cual Jesús también sufrió la muerte fuera de la ciudad, para purificar a su pueblo con su propia sangre.