Cuando ellos escucharon el testimonio que Jesús había resucitado y fue visto por ella, no le creyeron.
Lucas 24:41 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Sus discípulos estaban tan felices y maravillados que no podían creer en lo que estaban viendo, entonces Jesús les dijo: – ¿Tienen algo de comer? Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y como todavía ellos, de gozo, no lo creían, y estaban maravillados, les dijo: ¿Tenéis aquí algo de comer? Biblia Nueva Traducción Viviente Aun así, ellos seguían sin creer, llenos de alegría y asombro. Entonces les preguntó: «¿Tienen aquí algo para comer?». Biblia Católica (Latinoamericana) Y como no acababan de creerlo por su gran alegría y seguían maravillados, les dijo: '¿Tienen aquí algo que comer?' La Biblia Textual 3a Edicion Pero como ellos, a causa del gozo y del asombro, aún no creían,° les dijo: ¿Tenéis aquí algún alimento? Biblia Serafín de Ausejo 1975 No acabando ellos de creer aún de pura alegría y llenos de admiración, les preguntó: '¿Tenéis aquí algo que comer?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y como todavía ellos, de gozo, no lo creían, y estaban maravillados, les dijo: ¿Tenéis aquí algo de comer? |
Cuando ellos escucharon el testimonio que Jesús había resucitado y fue visto por ella, no le creyeron.
ellos comunicaron lo que vieron a los otros discípulos, pero no les creyeron a ellos tampoco.
Finalmente, mientras estaban sentados a la mesa, Jesús se les apareció a los once discípulos y les reprendió por su incredulidad y la dureza de sus corazones, ya que no creyeron a aquellos que habían dado testimonio de su resurrección.
Había también unos pocos peces, y los bendijo y se los entregó a los discípulos, para que los repartieran.
Lo mismo les pasa a ustedes, ahora tienen tristeza, pero después los veré de nuevo, y sus corazones se alegrarán, y la auténtica alegría de ustedes nadie se las podrá quitar.
Jesús dijo: – Muchachos, ¿ustedes no tienen algo de comer para que me den? Le respondieron: – No.
Al reconocer la voz de Pedro, se llenó de tanta alegría que, en lugar de abrir la puerta, corrió emocionada hacia adentro para contarles a los demás que Pedro estaba llamando.