Porque si alabas a Dios solo con el espíritu, ¿cómo puede un creyente no instruido todavía, decir “amén” a tu acción de gracias, puesto que no entiende lo que dices?
Apocalipsis 5:14 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Los cuatro seres vivientes exclamaban: ¡Amén!, mientras los ancianos se postraron y adoraron. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Los cuatro seres vivientes decían: Amén; y los veinticuatro ancianos se postraron sobre sus rostros y adoraron al que vive por los siglos de los siglos. Biblia Nueva Traducción Viviente Y los cuatro seres vivientes decían: «¡Amén!». Y los veinticuatro ancianos se postraron y adoraron al Cordero. Biblia Católica (Latinoamericana) Y los cuatro Seres Vivientes decían 'Amén', mientras los Ancianos se postraban y adoraban. La Biblia Textual 3a Edicion Y los cuatro seres vivientes decían: ¡Amén! Y los ancianos se postraron y adoraron.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los cuatro seres vivientes decían: 'Amén'. Y los ancianos se postraron y adoraron. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los cuatro seres vivientes decían: Amén. Y los veinticuatro ancianos se postraron, y adoraron al que vive eternamente y para siempre. |
Porque si alabas a Dios solo con el espíritu, ¿cómo puede un creyente no instruido todavía, decir “amén” a tu acción de gracias, puesto que no entiende lo que dices?
Entonces los veinticuatro ancianos y los cuatro seres vivientes se postraron y adoraron a Dios, que estaba sentado en el trono, diciendo: “¡Amén, Aleluya!”.
Rodeaban al trono otros veinticuatro tronos en los que estaban sentados “veinticuatro ancianos” vestidos de blanco y con coronas de oro en sus cabezas.
y también algo parecido a un mar de vidrio, como de cristal transparente. En el centro, alrededor del trono, había cuatro seres vivientes cubiertos de ojos por delante y por detrás.
Luego vi y oí la voz de muchos ángeles que estaban alrededor del trono, de los seres vivientes y de los ancianos; el número de ellos era millones de millones y millares de millares.
Entonces vi en medio de los cuatro seres vivientes, del trono y los ancianos, a un Cordero que estaba de pie y parecía haber sido sacrificado. Tenía siete cuernos y siete ojos, que son los siete espíritus de Dios enviados por toda la tierra.
Y cuando lo tomó, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero. Cada uno tenía un arpa y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones del pueblo santo de Dios.
diciendo: “¡Amén! La alabanza, la gloria, la sabiduría, la acción de gracias, la honra, el poder y la fuerza a nuestro Dios por los siglos de los siglos. ¡Amén!”.