Me preocupo por ustedes, tal como lo hace Dios, pues yo prometí entregarlos en matrimonio a un solo esposo: Cristo; a Él quiero presentarlos como una virgen pura.
2 Corintios 2:4 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Escribí con gran tristeza y angustia de corazón y con muchas lágrimas, no para entristecerlos, sino para darles a conocer la profundidad del amor que les tengo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Porque por la mucha tribulación y angustia del corazón os escribí con muchas lágrimas, no para que fueseis contristados, sino para que supieseis cuán grande es el amor que os tengo. Biblia Nueva Traducción Viviente Escribí aquella carta con gran angustia, un corazón afligido y muchas lágrimas. No quise causarles tristeza, más bien quería que supieran cuánto amor tengo por ustedes. Biblia Católica (Latinoamericana) En efecto, les escribí profundamente preocupado y afligido, y hasta con lágrimas; no quería causarles tristeza, sino que se dieran cuenta del amor inmenso que les tengo. La Biblia Textual 3a Edicion Porque por la mucha aflicción y angustia de corazón os escribí con muchas lágrimas, no para que fuerais entristecidos, sino para que conocierais el amor que os tengo, especialmente a vosotros. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso, llevado de mucha angustia y ansiedad de corazón, os escribí con muchas lágrimas. Pero no para proporcionaros disgusto, sino para daros a conocer el amor tan especial que siento por vosotros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque por la mucha tribulación y angustia del corazón os escribí con muchas lágrimas; no para que fueseis contristados, sino para que supieseis cuán grande amor tengo para con vosotros. |
Me preocupo por ustedes, tal como lo hace Dios, pues yo prometí entregarlos en matrimonio a un solo esposo: Cristo; a Él quiero presentarlos como una virgen pura.
Me siento feliz de gastar todo lo que tengo, incluso a mí mismo, para ayudarlos integralmente. ¿Será que cuanto más los quiero, menos me quieren ustedes?
Porque para esto también les escribí para estar seguro de que ustedes sean obedientes en todo.
Cuando les escribí, no fue por causa del ofensor ni del ofendido, sino que mi motivación fue que ustedes fueran más dignos delante de Dios y se dieran cuenta del profundo amor que tienen por nosotros.
Por ahí andan muchos descarriados, yo les advertí de ellos, y ahora con lágrimas en mis ojos, les digo: “Ellos son enemigos de la cruz de Cristo”;