Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Proverbios 6:3 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

entonces has caído en las manos de tu amigo. Haz esto que te digo para poder librarte: trágate tu orgullo y suplícale que deshaga el compromiso.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Haz esto ahora, hijo mío, y líbrate, Ya que has caído en la mano de tu prójimo; Ve, humíllate, y asegúrate de tu amigo.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

sigue mi consejo y sálvate, pues te has puesto a merced de tu amigo. Ahora trágate tu orgullo; ve y suplica que tu amigo borre tu nombre.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Pues bien, haz esto, hijo mío: ¡libérate lo más pronto! ¿No ves que estás a merced de otro? ¡Anda a verlo, ponte de rodillas, suplícale!

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Haz esto ahora hijo mío, y líbrate, Ya que has caído en la mano de tu prójimo: Ve, humíllate, e importuna a tu prójimo.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

haz esto, hijo mío, para librarte, pues has caído en poder de tu prójimo: ve corriendo y ruega a tu prójimo;

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Haz esto ahora, hijo mío, y líbrate, ya que has caído en la mano de tu prójimo; ve, humíllate, y asegúrate de tu amigo.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Proverbios 6:3
8 Tagairtí Cros  

―Es una decisión difícil —respondió David—, pero es mejor caer en las manos del Señor, porque grande es su misericordia, que en manos de los hombres.


El profeta Semaías se reunió con Roboán y con los dirigentes de Judá que, por miedo a Sisac, se habían reunido en Jerusalén, y les dijo: ―Así ha dicho el Señor: “Ustedes me han abandonado; por lo tanto yo los he entregado en manos de Sisac”.


También fue un mal rey, pues hizo lo que no le agrada al Señor. Se negó a aceptar el consejo que el Señor le envió por medio del profeta Jeremías.


No me entregaste a mi enemigo sino que me pusiste en un lugar seguro.


Moisés y Aarón pidieron otra audiencia al faraón y le dijeron: ―El Señor, Dios de los hebreos, pregunta: “¿Hasta cuando te negarás a someterte a mí? Deja que mi pueblo vaya y me adore.


si tú mismo te comprometiste y has quedado atrapado en tus propias palabras,


No lo dejes para después. Hazlo ahora. No descanses hasta que lo hayas hecho.


Humíllense delante del Señor, y él los pondrá en alto.