Entonces Dios contempló todo lo que había hecho, y vio que era muy, pero muy hermoso. Pasó la tarde y pasó la mañana, y se completó, así, el sexto día.
Proverbios 16:4 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Toda obra del Señor tiene un propósito; ¡hasta el malvado fue hecho para el día del desastre! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Todas las cosas ha hecho Jehová para sí mismo, Y aun al impío para el día malo. Biblia Nueva Traducción Viviente El Señor ha hecho todo para sus propios propósitos, incluso al perverso para el día de la calamidad. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé hizo todo con un propósito, y al mismo malvado, para el día del castigo. La Biblia Textual 3a Edicion Todas las cosas las hizo YHVH para sí mismo, Aun al impío para el día malo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Todo lo hizo Yahveh con un fin: también al malvado para el día de la miseria. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Todas las cosas ha hecho Jehová para sí mismo, y aun al impío para el día del mal. |
Entonces Dios contempló todo lo que había hecho, y vio que era muy, pero muy hermoso. Pasó la tarde y pasó la mañana, y se completó, así, el sexto día.
Anda errante mendigando alimento. Vive en el temor, la zozobra y la angustia. Sus enemigos lo vencen como un rey que derrota a sus enemigos.
que al malvado suele eximírsele en el día de la calamidad, y permitírsele que huya. Nadie lo reprende en público. Nadie le da su merecido. Y una guardia de honor le rinde homenaje en su tumba.
pero no lo hice, porque quiero que todos sepan cuán poderoso soy, y para que mi nombre se mencione en todo el país.
El Señor aborrece a los orgullosos; puedes estar seguro que recibirán su castigo.
Todo está bien en su momento oportuno. Pero si bien Dios ha plantado la eternidad en el corazón de todo hombre y mujer, el ser humano es incapaz de una plena visión de la obra de Dios de principio a fin.
Yo hice a Israel para mí, y algún día este pueblo mío me honrará ante el mundo.
Vendrán todos los que me invocan como su Dios, pues para gloria mía los hice, yo los creé.
Porque, todo fue creado por Dios, existe por él y para él. ¡A él sea la gloria siempre! Así sea.
¿Acaso no tiene Dios el mismo derecho de desatar su ira y su poder contra los que merecían su castigo y estaban preparados para destrucción, con los cuales ya había sido muy paciente?
Y también: «Es una piedra con la cual tropezarán y una roca que hará que caigan». Tropiezan porque no obedecen la palabra, ya que para ello estaban destinados.
Tan ambiciosos serán esos maestros que les dirán cualquier cosa con tal de sacarles dinero. Pero Dios hace tiempo que ha dictado sentencia contra ellos y su destrucción está por caerles encima.
No cabe duda entonces de que el Señor sabrá rescatar de las tentaciones a los que viven como él quiere y reservará a los injustos para castigarlos en el día del juicio.
«Señor, eres digno de recibir la gloria, la honra y el poder, porque tú creaste el universo. Lo que existe, existe porque tú quisiste crearlo».