Y esto dice él a todos los hombres: «Escuchen: temer al Señor es verdadera sabiduría; abandonar el mal es verdadero entendimiento».
Proverbios 1:7 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Lo primero que hay que hacer para empezar a ser sabios, es honrar al Señor. Sólo los necios desprecian la sabiduría y la disciplina. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza. Biblia Nueva Traducción Viviente El temor del Señor es la base del verdadero conocimiento, pero los necios desprecian la sabiduría y la disciplina. Biblia Católica (Latinoamericana) El comienzo del saber es el temor de Yavé,
únicamente los tontos desprecian la sabiduría y la disciplina. La Biblia Textual 3a Edicion El principio de la sabiduría es el temor de YHVH, Pero los insensatos desprecian la sabiduría y la instrucción. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El principio de la ciencia es el temor de Yahveh. Los necios desprecian sabiduría y disciplina. Biblia Reina Valera Gómez (2023) El principio de la sabiduría es el temor de Jehová: Los insensatos desprecian la sabiduría y la instrucción. |
Y esto dice él a todos los hombres: «Escuchen: temer al Señor es verdadera sabiduría; abandonar el mal es verdadero entendimiento».
El principio de la sabiduría es el temor al Señor. La recompensa para todos los que lo obedecen es la sabiduría. ¡Alabemos su nombre por siempre!
«Jóvenes inexpertos, ¿hasta cuándo disfrutarán su inexperiencia, sus burlas y despreciarán el conocimiento?
El que rechaza la corrección se daña él mismo; el que atiende la reprensión gana entendimiento.
El honrar al Señor enseña sabiduría; primero viene la humildad y luego la honra.
El necio menosprecia la corrección de su padre; el que la toma en cuenta demuestra inteligencia.
Al necio no le interesa entender; todo lo que quiere es dar su propia opinión.
entonces comprenderás lo que es honrar al Señor y encontrarás el conocimiento de Dios.
No malgastes tus palabras con el necio, él despreciará el consejo más sabio.
Lo primero que hay que hacer para adquirir sabiduría es honrar al Señor; conocer al Santo es tener inteligencia.
Y esta es mi conclusión definitiva: teme a Dios y obedece sus mandamientos, porque esto es lo más importante para todo hombre y mujer.
A tal grado llegaron que, al no querer ni siquiera tener en cuenta a Dios, él los abandonó para que hicieran lo que sus mentes corruptas pudieran concebir.
Si las obedecen, obtendrán reputación de sabiduría e inteligencia. Cuando las naciones que los rodeen oigan estas leyes, exclamarán: “¿Qué otra nación es tan sabia y prudente como Israel?”.