Entonces el pueblo dijo: «Vamos, librémonos de Jeremías. Nosotros tenemos sacerdotes, sabios y profetas, no necesitamos su consejo. Acallémoslo para que no hable más contra nosotros ni nos vuelva a molestar».
Oseas 4:4 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 »¡No señales con tu dedo a alguna otra persona, tratando de pasarle la culpa! ¡Mira, sacerdote, yo estoy señalándote a ti con mi dedo! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Ciertamente hombre no contienda ni reprenda a hombre, porque tu pueblo es como los que resisten al sacerdote. Biblia Nueva Traducción Viviente »¡No señales a otro para echarle la culpa! ¡Mi queja, sacerdotes, es con ustedes! Biblia Católica (Latinoamericana) Pero que nadie acuse o se defienda, pues contra ti, sacerdote, es mi demanda. La Biblia Textual 3a Edicion Pero, nadie acuse ni reprenda a otro, Porque, oh sacerdote, es contigo mi querella. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero que nadie acuse y nadie reproche. Contra ti me querello, sacerdote: Biblia Reina Valera Gómez (2023) Ciertamente hombre no contienda ni reprenda a hombre, porque tu pueblo es como los que resisten al sacerdote. |
Entonces el pueblo dijo: «Vamos, librémonos de Jeremías. Nosotros tenemos sacerdotes, sabios y profetas, no necesitamos su consejo. Acallémoslo para que no hable más contra nosotros ni nos vuelva a molestar».
Yo haré que tu lengua se pegue a tu paladar para que no puedas hablar para reprenderles, pues ellos son rebeldes y tercos.
Como Efraín, es decir, Israel, se ha entregado a los ídolos, ¡pues que se quede con ellos!
¡Cómo odian ustedes a los jueces honestos! ¡Cómo desprecian a la gente que dice la verdad!
Por eso, debido a la maldad que existe, el prudente se queda callado.
Y cuando algún familiar llegue a la casa para sacar los cadáveres y le pregunte a otro pariente que esté allí: «¿Queda aún algún cadáver?». Este le responderá: «No». Entonces el primero le dirá: «¡No digas más nada, no sea que pronuncies el nombre del Señor y nos suceda algo peor también a nosotros!».
Si alguien se niega a aceptar la decisión del juez señalado por el Señor para este propósito, su castigo será la muerte. Este tipo de pecadores deberá ser desarraigado de Israel.