Entonces los entregué a su ceguera y necedad, a que vivieran como mejor les pareciera.
Números 22:20 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Aquella noche el Señor le dijo a Balán: ―Levántate y ve con aquellos hombres, pero harás solamente lo que yo te ordene. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y vino Dios a Balaam de noche, y le dijo: Si vinieron para llamarte estos hombres, levántate y vete con ellos; pero harás lo que yo te diga. Biblia Nueva Traducción Viviente Esa noche Dios vino a Balaam y le dijo: «Ya que estos hombres vinieron por ti, levántate y ve con ellos, pero solo haz lo que yo te indique». Biblia Católica (Latinoamericana) Esa noche se apareció Dios a Balaam y le dijo: '¿Así que esos hombres vinieron a invitarte? ¡Muy bien, parte con ellos, pero sólo harás lo que te diga!' La Biblia Textual 3a Edicion Y vino ’Elohim a Balaam de noche y le dijo: Si los hombres han venido para llamarte, levántate y ve con ellos, pero le dirás solo la palabra que Yo hable contigo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dios vino a Balaán durante la noche y le dijo: '¿No han venido a buscarte esos hombres? Levántate, vete con ellos, pero no harás más que lo que yo te diga'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y vino Dios a Balaam de noche, y le dijo: Si los hombres han venido a llamarte, levántate y ve con ellos; pero hablarás sólo las palabras que yo te diga. |
Entonces los entregué a su ceguera y necedad, a que vivieran como mejor les pareciera.
Eso fue por causa de tu ira contra el Señor, ¡y yo lo escuché todo!, por eso te he puesto un gancho en la nariz y una brida en la boca y te he llevado de regreso a tu tierra por el camino en que viniste”».
No digas eso, respondió el Señor, pues tú irás a dondequiera que yo te envíe y anunciarás lo que yo te diga.
Yo te di reyes cuando estaba enojado, y luego te los quité cuando estaba furioso.
Sin embargo, pasen aquí la noche para ver si el Señor añade algo a lo que me dijo antes.
El ángel le dijo: ―Ve con esos hombres, pero hablarás solamente lo que yo te diga. Balán, siguió con ellos.
Pero Balán contestó: ―¿No te dije que yo tengo que decir lo que el Señor me diga?
que aunque me dieras un palacio lleno de oro y plata, yo no podría contradecir al Señor; te advertí que no podía hablar por mí mismo. Dije que hablaría solamente lo que el Señor me ordenara.
el hombre cuyos ojos están abiertos, dice: He oído la palabra del Señor, y he visto lo que el Dios Altísimo me ha mostrado; mis ojos fueron abiertos: