Purifícame con hisopo, y volveré a ser puro. Lávame, y seré más blanco que la nieve.
Números 19:18 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Entonces una persona que no esté impura tomará de una rama de hisopo, y la mojará en agua y rociará la tienda y todos los muebles que haya en la tienda, y todas las personas que se hayan contaminado por haber estado en la tienda. También rociará a las personas contaminadas por haber tocado un hueso, o por haber tocado a alguien que ha sido asesinado o que ha muerto de muerte natural, o por haber tocado una tumba. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 y un hombre limpio tomará hisopo, y lo mojará en el agua, y rociará sobre la tienda, sobre todos los muebles, sobre las personas que allí estuvieren, y sobre aquel que hubiere tocado el hueso, o el asesinado, o el muerto, o el sepulcro. Biblia Nueva Traducción Viviente Después, alguien ceremonialmente puro tomará una rama de hisopo y la mojará en el agua. Esa persona debe rociar el agua sobre la carpa, sobre todos los muebles de la carpa y sobre las personas que estaban en ella; también sobre la persona que tocó un hueso humano, o tocó a una persona que mataron o que murió de muerte natural, o tocó una tumba. Biblia Católica (Latinoamericana) Luego un hombre puro tomará una ramita de hisopo, la sumergerá en el agua y rociará la tienda y a todos los objetos y personas que haya en ella; se hará lo mismo con el que tocó los huesos, al muerto o la tumba. La Biblia Textual 3a Edicion Luego, un hombre limpio tomará una rama de hisopo y la mojará en el agua, y rociará la tienda, todos los utensilios y las personas que estén allí junto con aquel que haya tocado la osamenta o el cadáver o el sepulcro. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Un hombre puro tomará hisopo, lo sumergirá en el agua y rociará la tienda y todos los muebles y personas que allí se encuentren, y también al que haya tocado huesos, o a un hombre asesinado, o a un muerto cualquiera, o un sepulcro. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y una persona limpia tomará hisopo, y lo mojará en el agua, y rociará sobre la tienda, y sobre todos los vasos, y sobre las personas que allí estuvieren, y sobre aquel que hubiere tocado el hueso, o el asesinado, o el muerto, o el sepulcro: |
Purifícame con hisopo, y volveré a ser puro. Lávame, y seré más blanco que la nieve.
Para purificarlo se tomarán cenizas de la ternera alazana quemada para pago por el pecado y se pondrán en un recipiente y se llenará con aguas de manantial.
Esto se hará los días tercero y séptimo. Enseguida la persona impura lavará su ropa, se bañará y en la noche quedará libre de su contaminación.
Y otro hombre limpio reunirá las cenizas de la ternera y las colocará en algún lugar purificado fuera del campamento, donde serán conservadas por el pueblo de Israel para preparar el agua de las ceremonias de purificación para remisión del pecado.
Y por ellos yo me santifico a mí mismo, para que también ellos sean santificados en la verdad.
Por Dios es por quien ustedes están unidos a Cristo Jesús, a quien Dios ha hecho nuestra sabiduría, nuestra justificación, nuestra santificación y nuestra redención.
Y si esto es así, ¡la sangre de Cristo es todavía mejor! Pues por medio del Espíritu eterno, Cristo se ofreció a sí mismo a Dios como sacrificio sin mancha para purificar nuestra conciencia de las obras que conducen a la muerte, para que sirvamos al Dios viviente.
Moisés, después de anunciar a todo el pueblo los mandamientos de la ley, tomó lana roja y ramas de hisopo, las mojó con la sangre de los becerros y los chivos mezclada con agua, y con eso roció el libro de la ley y a todo el pueblo.