»¡Deja de disputar con Dios! Ponte de acuerdo con él y al fin tendrás paz. Su favor te rodeará sólo con reconocer tu error.
Mateo 5:25 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Reconcíliate con tu enemigo de inmediato antes que sea demasiado tarde, te lleve a juicio y te arrojen en la cárcel. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Ponte de acuerdo con tu adversario pronto, entre tanto que estás con él en el camino, no sea que el adversario te entregue al juez, y el juez al alguacil, y seas echado en la cárcel. Biblia Nueva Traducción Viviente »Cuando vayas camino al juicio con tu adversario, resuelvan rápidamente las diferencias. De no ser así, el que te acusa podría entregarte al juez, quien te entregará a un oficial y te meterán en la cárcel. Biblia Católica (Latinoamericana) Trata de llegar a un acuerdo con tu adversario mientras van todavía de camino al juicio. ¿O prefieres que te entregue al juez, y el juez a los guardias, que te encerrarán en la cárcel? La Biblia Textual 3a Edicion Ponte de acuerdo con tu adversario pronto, mientras estás con él en el camino, no sea que el adversario te entregue al juez, y el juez al alguacil, y seas echado en la cárcel. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Procura hacer a tiempo las paces con tu contrario mientras vas con él por el camino; no sea que él te entregue al juez, y el juez al guardia, y te metan en la cárcel. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Ponte de acuerdo pronto con tu adversario, mientras estás con él en el camino, no sea que el adversario te entregue al juez, y el juez te entregue al alguacil, y seas echado en la cárcel. |
»¡Deja de disputar con Dios! Ponte de acuerdo con él y al fin tendrás paz. Su favor te rodeará sólo con reconocer tu error.
Por eso los fieles te invocan en momentos de angustia; caudalosas aguas podrán desbordarse, pero a ellos no los alcanzarán.
no te des prisa en llevarlo al tribunal, pues tu prójimo puede ponerte en vergüenza y al final no sabrás qué hacer.
Pedro lo siguió de lejos, llegó hasta el patio del sumo sacerdote y se sentó entre los soldados a esperar el desarrollo de los acontecimientos.
En ese mismo pueblo vivía una viuda que no se cansaba de decirle: “Hágame usted justicia contra mi enemigo”.
Porque Dios dice: «Escuché tu clamor en tiempo favorable, y en día de salvación te socorrí». Ahora mismo es el tiempo favorable de Dios; hoy es el día de la salvación.
Y después, como ustedes ya saben, quiso heredar esa bendición, ¡pero fue rechazado!; y, aunque con lágrimas buscó la bendición, no se le dio oportunidad de arrepentirse.
Exhórtense todos los días mientras les quede tiempo, para que ninguno se endurezca contra Dios, cegado por el engaño del pecado,