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Lucas 8:38 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

el hombre del que habían salido los demonios le suplicó que lo dejara acompañarlo; pero Jesús le dijo:

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Y el hombre de quien habían salido los demonios le rogaba que le dejase estar con él; pero Jesús le despidió, diciendo:

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Biblia Nueva Traducción Viviente

El hombre que había sido liberado de los demonios le suplicaba que le permitiera acompañarlo. Pero Jesús lo envió a su casa diciéndole:

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Biblia Católica (Latinoamericana)

el hombre del que habían salido los demonios le rogaba que lo admitiera en su compañía. Pero Jesús lo despidió diciéndole:

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y el varón de quien habían salido los demonios le rogaba estar con Él; pero le respondió, diciendo:

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

El hombre de quien habían salido los demonios le rogaba que le permitiera acompañarlo; pero él lo despidió, diciéndole:

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y aquel hombre de quien habían salido los demonios le rogaba que le permitiese estar con Él; mas Jesús le despidió, diciendo:

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Lucas 8:38
24 Tagairtí Cros  

Y ahora, ¿cómo puedo pagarle al Señor por tanta bondad que me ha mostrado?


Señor, soy tu siervo; sí, soy tu siervo y el hijo que tú has hecho; ¡tú has roto mis cadenas!


Lo que pido de Dios, lo que más deseo, es el privilegio de meditar en su templo, vivir en su presencia cada día de mi vida y deleitarme en su perfección y gloria.


Tú eres mi refugio; tú me protegerás del peligro y me rodearás con cánticos de liberación.


Su fama llegó hasta Siria, y le traían todo tipo de enfermos: No había enfermo, endemoniado, loco o paralítico que le trajeran y a quien no sanara.


Cuando vio a Jesús, lanzó un grito y cayó de rodillas ante él. Entonces dijo a gran voz: ―¿Qué quieres conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? ¡Te ruego que no me atormentes!


Entonces toda la gente de la región de los gerasenos le pidió a Jesús que se fuera de allí, porque todos tenían mucho miedo. En el momento en que Jesús subía a la barca para irse,


―Vuelve a tu casa y cuenta todo lo que Dios ha hecho por ti. El hombre se fue y le contó a todo el pueblo lo que Jesús había hecho por él.


Realmente me es difícil elegir cualquiera de las dos posibilidades. Deseo morir y estar con Cristo, que es muchísimo mejor;