―Guárdate el dinero —le dijo el rey—. Te entrego ese pueblo. Haz con él lo que bien te parezca.
Lucas 23:25 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Ordenó que dejaran libre al hombre que estaba preso por rebelde y asesino, y les entregó a Jesús para que hicieran con él lo que quisieran. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 y les soltó a aquel que había sido echado en la cárcel por sedición y homicidio, a quien habían pedido; y entregó a Jesús a la voluntad de ellos. Biblia Nueva Traducción Viviente Como habían pedido, puso en libertad a Barrabás, el que estaba preso por levantamiento y asesinato. Y les entregó a Jesús para que hicieran con él como quisieran. Biblia Católica (Latinoamericana) Soltó al que estaba preso por agitador y asesino, pues a éste lo querían, y entregó a Jesús como ellos pedían. La Biblia Textual 3a Edicion Soltó entonces al que pedían (que había sido echado en la cárcel por insurrección y homicidio), y entregó a Jesús a la voluntad de ellos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Puso en libertad al que reclamaban, al que había sido encarcelado por motín y homicidio, y a Jesús lo entregó a su arbitrio. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y les soltó a aquél que había sido echado en la cárcel por sedición y homicidio, al cual habían pedido; y entregó a Jesús a la voluntad de ellos. |
―Guárdate el dinero —le dijo el rey—. Te entrego ese pueblo. Haz con él lo que bien te parezca.
Pilato soltó a Barrabás. Pero a Jesús lo azotó y lo entregó a los soldados romanos para que lo crucificaran.
Como Pilato quería tener contenta a la gente, dejó en libertad a Barrabás; después mandó que azotaran a Jesús y lo entregó para que lo crucificaran.
Comenzaron a acusarlo, diciendo: ―Encontramos a este hombre alborotando a nuestra nación. Está en contra de que se paguen impuestos al emperador y asegura que él es el Cristo, el rey.
Cuando se lo llevaban, obligaron a un hombre de Cirene, llamado Simón, a que fuera detrás de Jesús cargando la cruz. Este hombre volvía en ese momento del campo.
Pero ellos seguían insistiendo: ―Con sus enseñanzas alborota al pueblo por toda Judea. Comenzó en Galilea y ya llegó hasta aquí.
Ellos volvieron a gritar: ―¡No! ¡No sueltes a este, suelta a Barrabás! Y Barrabás era un bandido.
Entonces Pilato se lo entregó para que lo crucificaran, y los soldados se lo llevaron.
Ustedes no quisieron que libertaran al Santo y Justo; al contrario, demandaron la libertad de un asesino
Bien, este es el rey que ustedes pidieron. Mírenlo. El Señor les ha contestado su petición.