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Lucas 16:23 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

En el infierno, en medio de sus tormentos, el rico vio a lo lejos a Abraham, y a Lázaro junto a él.

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Biblia Reina Valera 1960

Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

y fue al lugar de los muertos. Allí, en medio del tormento, vio a Abraham a lo lejos con Lázaro junto a él.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Estando en el infierno, en medio de los tormentos, el rico levantó los ojos y vio a lo lejos a Abrahán y a Lázaro con él en su regazo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y alzando sus ojos en el Hades, estando° en tormentos, ve a Abraham desde lejos y a Lázaro en su regazo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Y en el abismo, estando en medio de tormentos, levantó los ojos y vio desde lejos a Abrahán, y a Lázaro en su seno.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y en el infierno alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio a Abraham de lejos, y a Lázaro en su seno.

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Lucas 16:23
26 Tagairtí Cros  

porque no me dejarás entre los muertos; no permitirás que tu amado se pudra en el sepulcro.


Pero en cuanto a mí; Dios redimirá mi alma del poder de la muerte; porque él me recibirá.


porque tu amor por mí es muy grande. Me has rescatado de las profundidades del sepulcro.


Los malvados serán enviados al sepulcro; este es el destino de las naciones que olvidan al Señor.


El camino de los sabios sube hacia la vida, y los libra de bajar al sepulcro.


Quien cae en sus redes, va derecho a la tumba; su estilo de vida es un pase directo a la muerte.


Su casa es la puerta por la que llegas rápido a la muerte.


Pero ellos no se dan cuenta que allí está la muerte, y que sus invitados ahora están en el fondo de la fosa.


Pero en vez de ello, serás hundido en lo más profundo del abismo infernal.


Los moradores del infierno se apiñan para recibirte cuando entras en su dominio. Caudillos de todo el mundo y los más poderosos reyes, muertos hace mucho, están allí para verte.


¡Y tú, Capernaúm, ¿serás elevada hasta el cielo? ¡No! Te irás a lo profundo del infierno. Porque si los milagros que se realizaron en ti se hubieran realizado en Sodoma, esta ciudad existiría todavía.


Y si tu ojo te hace pecar, sácatelo y échalo a la basura. Mejor te es entrar tuerto al reino de los cielos que ir al infierno con los dos ojos.


¡Serpientes, crías de víboras! ¿Cómo van a escapar de la condenación del infierno?


Pues yo añado que el que se enoja contra su hermano está cometiendo el mismo delito. El que le dice “idiota” a su hermano, merece que lo lleven al juzgado. Y el que maldiga a una persona, merece ir a parar a las llamas del infierno.


Así que si uno de tus ojos te hace pecar, sácatelo y échalo lejos. Es mejor perder un miembro del cuerpo, y no que el cuerpo entero sea echado al infierno.


Al ver a Jesús, le gritaron: ―¡Déjanos tranquilos, Hijo de Dios! ¡Todavía no es hora de que nos atormentes!


Entonces lo llamó a gritos: “Padre Abraham, ten compasión de mí. Manda a Lázaro a que moje la punta de su dedo en agua y me refresque la lengua, porque estoy sufriendo mucho en este fuego”.


para que avise a mis cinco hermanos, y no vengan ellos también a este lugar de tormento”.


Cuando vio a Jesús, lanzó un grito y cayó de rodillas ante él. Entonces dijo a gran voz: ―¿Qué quieres conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? ¡Te ruego que no me atormentes!


«¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde está, oh sepulcro, tu victoria?».


Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que los arrojó al infierno y los dejó encadenados en prisiones de oscuridad hasta el día del juicio.


Entonces el diablo, el que los había vuelto a engañar, será arrojado al lago de fuego y azufre, en el que ya estaban la bestia y el falso profeta. Allí serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.