Su fama llegó hasta Siria, y le traían todo tipo de enfermos: No había enfermo, endemoniado, loco o paralítico que le trajeran y a quien no sanara.
Lucas 10:17 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Los setenta y dos discípulos regresaron contentos de la misión y dijeron: ―Señor, hasta los demonios nos obedecen cuando les damos órdenes en tu nombre. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Volvieron los setenta con gozo, diciendo: Señor, aun los demonios se nos sujetan en tu nombre. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando los setenta y dos discípulos regresaron, le informaron llenos de alegría: —¡Señor, hasta los demonios nos obedecen cuando usamos tu nombre! Biblia Católica (Latinoamericana) Los setenta y dos discípulos volvieron muy contentos, diciendo: 'Señor, hasta los demonios nos obedecen al invocar tu nombre. La Biblia Textual 3a Edicion Regresaron los setenta y dos° con gozo, diciendo: Señor, aun los demonios se nos someten en tu nombre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Volvieron, pues, los setenta [y dos] llenos de alegría, diciendo: '¡Señor, hasta los demonios se nos someten en tu nombre!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y volvieron los setenta con gozo, diciendo: Señor, aun los demonios se nos sujetan en tu nombre. |
Su fama llegó hasta Siria, y le traían todo tipo de enfermos: No había enfermo, endemoniado, loco o paralítico que le trajeran y a quien no sanara.
Y estas señales acompañarán a los que crean: en mi nombre expulsarán demonios, hablarán nuevas lenguas,
Después de esto, el Señor escogió a otros setenta y dos discípulos y los envió de dos en dos para que llegaran antes que él a todos los pueblos y lugares donde él pensaba ir.
Sin embargo, no se alegren de que los espíritus les obedezcan, sino alégrense de que sus nombres están escritos en el cielo.
Sanen a los enfermos y díganles: “El reino de Dios ya está cerca de ustedes”.
Jesús reunió a sus doce discípulos y les dio poder y autoridad para echar fuera a todos los demonios y para sanar enfermedades.
Pronto el Dios de paz aplastará a Satanás bajo sus pies. Que la gracia de nuestro Señor Jesús esté con ustedes.
Así que las esposas deben estar sujetas en todo a sus esposos, así como la iglesia lo está a Cristo.