Porque el Señor que te permitió vestirte con tal magnificencia, te arrojará y te enviará en cautiverio. ¡Oh gran hombre,
Jeremías 10:18 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Porque súbitamente los arrojaré de esta tierra y permitiré que les acontezcan grandes desgracias; por fin probarán mi cólera. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Porque así ha dicho Jehová: He aquí que esta vez arrojaré con honda los moradores de la tierra, y los afligiré, para que lo sientan. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues esto dice el Señor: «De forma repentina echaré a todos los que viven en esta tierra. Derramaré sobre ustedes grandes dificultades, y por fin sentirán mi enojo». Biblia Católica (Latinoamericana) Pues así habla Yavé: 'Voy a lanzar muy lejos a los habitantes del país y los haré perseguir de manera que los alcancen. La Biblia Textual 3a Edicion Porque así dice YHVH: He aquí esta vez arrojaré con una honda a los habitantes del país, Y los afligiré, para que lo sientan. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pues así dice Yahveh: 'Aquí estoy: voy a lanzar con honda, esta vez sí, a los habitantes del país; los voy a poner en aprieto, para que sean alcanzados'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque así dice Jehová: He aquí que esta vez arrojaré con honda a los moradores de la tierra, y los afligiré, para que lo hallen así. |
Porque el Señor que te permitió vestirte con tal magnificencia, te arrojará y te enviará en cautiverio. ¡Oh gran hombre,
Por lo tanto yo los echaré de esta tierra y serán llevados a la fuerza a tierras extrañas en donde ni ustedes ni sus antepasados estuvieron antes, y allá rendirán homenaje a sus ídolos. ¡Y no esperen que los perdone!
La terrible cólera del Señor no se aplacará hasta que haya ejecutado todo el castigo planeado. Más adelante comprenderán mejor lo que les estoy diciendo.
Entonces se darán cuenta que sólo yo soy el Señor y que no estaba hablando en broma cuando les advertí que todo esto les sucedería”».
Por haber obrado tan mal contra el Señor, él hará que ese día todos sean angustiados y anden como ciegos sin darse cuenta ni por donde caminan. Su sangre correrá por las calles, y sus cuerpos se pudrirán sobre la tierra.
Pero se cumplió en ellos todo lo que les advertí por medio de mis profetas. Sí, el castigo anunciado cayó sobre ellos. Entonces al fin se arrepintieron. “Hemos recibido del Señor Todopoderoso lo que merecían nuestras malas acciones”, dijeron. “El Señor hizo lo que nos había advertido que haría”».
Esa nación pondrá sitio a tus ciudades y derribará tus murallas altas, en las cuales confiaste creyendo que serían tu protección.
Aun cuando te persigan los que quieren arrancarte la vida, tú estás seguro bajo el cuidado del Señor tu Dios. Pero la vida de tus enemigos desaparecerá como piedras lanzadas con honda.