Estás embarazada y tendrás un hijo, y lo llamarás Ismael (Dios oye), porque el Señor ha escuchado tu dolor.
Génesis 3:20 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Luego el hombre le puso a su mujer el nombre de Eva, pues ella sería la madre de todos los seres humanos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y llamó Adán el nombre de su mujer, Eva, por cuanto ella era madre de todos los vivientes. Biblia Nueva Traducción Viviente Después, el hombre —Adán— le puso a su esposa el nombre Eva, porque ella sería la madre de todos los que viven. Biblia Católica (Latinoamericana) El hombre dio a su mujer el nombre de 'Eva', por ser la madre de todo viviente. La Biblia Textual 3a Edicion Y el hombre llamó el nombre de su mujer Eva,° por cuanto ella llegó a ser madre de todo viviente. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El hombre llamó Eva a su mujer, porque fue la madre de todos los vivientes. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y llamó Adán el nombre de su esposa, Eva; por cuanto ella era la madre de todos los vivientes. |
Estás embarazada y tendrás un hijo, y lo llamarás Ismael (Dios oye), porque el Señor ha escuchado tu dolor.
Al verla, el hombre exclamó: «¡Esta sí es hueso de mis huesos y carne de mi carne! Se llamará “mujer” porque fue sacada del hombre».
Dios el Señor hizo túnicas de pieles de animales, y con ellas vistió al hombre y a su mujer.
Pero Raquel murió luego de dar a luz a su hijo. Sin embargo, cuando estaba agonizando alcanzó a decir que su hijo se llamaría Benoní, es decir, «hijo de mi tristeza». Pero Jacob lo llamó Benjamín, que quiere decir «Hijo de mi mano derecha».
Cuando el niño creció, la madre se lo llevó a la princesa, y ella lo adoptó como hijo suyo. Lo llamó Moisés, porque lo había sacado de las aguas.
María tendrá un hijo y lo llamarán Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados».
«¡Miren! La virgen concebirá y tendrá un hijo y lo llamarán Emanuel» (que quiere decir «Dios está con nosotros»).
De un solo hombre creó a la humanidad, y luego distribuyó las naciones sobre la faz de la tierra, tras decidir de antemano cuándo y cuáles serían sus fronteras.
Pero temo que de alguna manera, engañados, se aparten de la pura y sincera devoción a Cristo, como se apartó Eva cuando la serpiente la engañó.
Pasado el tiempo, ella tuvo un hijo. Y le puso Samuel (Pedido a Dios) porque, como ella dijo: «Se lo pedí al Señor».