Entonces Dios contempló todo lo que había hecho, y vio que era muy, pero muy hermoso. Pasó la tarde y pasó la mañana, y se completó, así, el sexto día.
Génesis 2:3 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Y bendijo el séptimo día y lo instituyó como día santo, porque en ese día descansó después de haber creado todo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación. Biblia Nueva Traducción Viviente Dios bendijo el séptimo día y lo declaró santo, porque ese fue el día en que descansó de toda su obra de creación. Biblia Católica (Latinoamericana) Bendijo Dios el Séptimo día y lo hizo santo, porque ese día descansó de sus trabajos después de toda esta creación que había hecho. La Biblia Textual 3a Edicion Y bendijo ’Elohim el día séptimo y lo santificó,° porque en él cesó ’Elohim de toda su obra que había creado al actuar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Bendijo Dios el día séptimo y lo santificó, porque en él descansó de toda su obra creadora. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y bendijo Dios el día séptimo, y lo santificó, porque en él descansó de toda su obra que Dios había creado y hecho. |
Entonces Dios contempló todo lo que había hecho, y vio que era muy, pero muy hermoso. Pasó la tarde y pasó la mañana, y se completó, así, el sexto día.
Después de haber terminado todo lo que se había propuesto hacer, Dios descansó el séptimo día.
Aquí termina la historia de la creación del cielo y de la tierra. Cuando Dios el Señor hizo la tierra y el cielo,
Les diste las leyes acerca del reposo; y tú les ordenaste, por medio de tu siervo Moisés, que las obedecieran.
»Trabajarán seis días solamente y descansarán el séptimo. Esto es para dar descanso a su buey y su asno, a sus esclavos y al extranjero que viva con ustedes.
»Aun durante el tiempo de la siembra y el de la cosecha, solamente trabajarás durante seis días y descansarás el séptimo.
La bendición del Señor trae riquezas, sin que con ellas traiga tristeza.
Y les determiné el sábado, un día de descanso cada semana, como un señal entre ellos y yo, para recordarles que soy yo el Señor, quien los aparta en exclusividad para mí, y que ellos verdaderamente son mi pueblo elegido.
»Seis días trabajarán, pero descansarán el día séptimo. Ese día es un día muy especial. Por eso, no harán ningún tipo de trabajo, sino que lo dedicarán para adorarme. Donde quiera que ustedes vivan, ese día será dedicado a mí, pues yo soy el Señor.
»El sábado se hizo para el ser humano y no el ser humano para el sábado.
Luego regresaron a su casa y prepararon especias aromáticas y perfumes. Después descansaron el sábado, como lo manda la ley.