Ellos prepararon uno de los becerros y lo pusieron sobre el altar. Y estuvieron invocando a Baal toda la mañana. ―Baal, óyenos —gritaban, mientras saltaban alrededor del altar que habían construido. Pero no recibieron respuesta de ningún tipo.
Éxodo 8:14 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 La gente recogía todas las ranas muertas y las amontonaba. ¡En todo el país se sentía la peste de las ranas muertas! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y las juntaron en montones, y apestaba la tierra. Biblia Nueva Traducción Viviente Los egipcios las apilaron en grandes montones, y un hedor insoportable llenó todo el territorio. Biblia Católica (Latinoamericana) Los brujos de Egipto intervinieron también esta vez, y trataron de echar fuera a los mosquitos por medio de sus fórmulas secretas, pero no lo pudieron, de manera que los mosquitos siguieron persiguiendo a hombres y animales. La Biblia Textual 3a Edicion y las amontonaron en grandes montones, y el país hedía. Biblia Serafín de Ausejo 1975 También los magos intentaron producir mosquitos con sus encantamientos, pero no pudieron. Hombres y animales fueron presa de los mosquitos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y las juntaron en montones, y apestaban la tierra. |
Ellos prepararon uno de los becerros y lo pusieron sobre el altar. Y estuvieron invocando a Baal toda la mañana. ―Baal, óyenos —gritaban, mientras saltaban alrededor del altar que habían construido. Pero no recibieron respuesta de ningún tipo.
Gritaron toda la tarde hasta la hora del sacrificio, pero no hubo respuesta; no sucedió nada, nadie les prestó atención.
Los peces murieron, y el agua se contaminó, de tal modo que los egipcios tuvieron asco de beberla, y hubo sangre en todo Egipto.
Y el Señor hizo lo que Moisés le pidió. Entonces murieron todas las ranas que estaban en las casas, en las granjas y en el campo.
Pero cuando el faraón vio que se habían acabado las ranas, endureció su corazón y, tal como el Señor lo había advertido, no hizo caso a la petición que le habían hecho Moisés y Aarón.
Y el Señor hizo lo que había dicho, de modo que hubo una terrible plaga de tábanos en el palacio del faraón y en la casa de cada egipcio.
Los magos no pudieron presentarse delante de Moisés, pues también ellos, como toda la gente, tenían úlceras llenas de pus.
¡Qué necios consejeros tiene Zoán! El mejor de sus consejos para el rey de Egipto es completamente insensato y equivocado. ¿Continuarán vanagloriándose de su sabiduría? ¿Osarán hablarle al faraón de los muchos sabios que hay entre sus ascendientes?
El Señor está enfurecido contra las naciones, su ira se abalanza contra los ejércitos. Él los destruirá por completo, provocándoles gran mortandad.
»”Yo haré una enorme sepultura para Gog y sus ejércitos en el valle de los Viajeros, al oriente del Mar Muerto. Bloquearé el sendero de los viajeros. Allí Gog y todos sus ejércitos serán sepultados. Y cambiarán el nombre del lugar a ‘el valle del ejército de Gog’.
Yo venceré a estos ejércitos del norte y los enviaré muy lejos; los mandaré a una tierra árida y desértica. Los que marchaban al frente morirán en el Mar Muerto, y los que iban detrás se ahogarán en el Mediterráneo. ¡Se pudrirán y su hedor llenará la tierra!». ¡Sí, el Señor intervendrá con hechos extraordinarios a favor de ustedes!