Uzías organizó su ejército en regimientos, en los cuales eran alistados hombres de acuerdo con el censo hecho por el escriba Jeyel, por su ayudante Maseías, y por Jananías uno de los jefes del rey.
Éxodo 5:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Ese mismo día, el faraón les envió la siguiente orden a sus cuadrilleros y a los capataces que tenían que vigilar el trabajo del pueblo de Israel: Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y mandó Faraón aquel mismo día a los cuadrilleros del pueblo que lo tenían a su cargo, y a sus capataces, diciendo: Biblia Nueva Traducción Viviente Ese mismo día, el faraón dio la siguiente orden a los capataces egipcios y a los jefes de cuadrilla israelitas: Biblia Católica (Latinoamericana) Aquel mismo día Faraón dio la siguiente orden a los capataces del pueblo y a sus secretarios israelitas: La Biblia Textual 3a Edicion Y aquel mismo día Faraón ordenó a los supervisores° del pueblo° y a sus caporales,° diciendo: Biblia Serafín de Ausejo 1975 Aquel mismo día dio el Faraón esta orden a los capataces del pueblo y a los inspectores: Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y mandó Faraón aquel mismo día a los cuadrilleros del pueblo que le tenían a su cargo, y a sus gobernadores, diciendo: |
Uzías organizó su ejército en regimientos, en los cuales eran alistados hombres de acuerdo con el censo hecho por el escriba Jeyel, por su ayudante Maseías, y por Jananías uno de los jefes del rey.
Entonces los egipcios esclavizaron a los hebreos, y les pusieron capataces muy crueles. Estos les asignaron la dura tarea de edificar las ciudades de Pitón y Ramsés, que eran las ciudades donde el rey almacenaba todas las provisiones.
―He visto los profundos sufrimientos de mi pueblo en Egipto —le dijo el Señor—, y he oído sus oraciones en que piden liberación de sus duros capataces.
Los cuadrilleros y los capataces le informaron al pueblo: ―El faraón ha dado órdenes de que no les proporcionemos la paja para los ladrillos. Deben ir ustedes mismos a buscarla a donde puedan. Y deberán producir tantos ladrillos como antes.
«No se entregará más paja a los hebreos para la elaboración de los ladrillos. Sin embargo, no se les disminuirá en un solo ladrillo su cuota de producción, porque parecen no tener suficiente trabajo. De otro modo no hablarían de ir al desierto a ofrecerle sacrificio a su Dios.
El hombre bueno se preocupa por el bienestar de sus animales, pero el hombre malo es cruel.
Entonces el Señor le dijo a Moisés: ―Convócame a setenta dirigentes de Israel y reúnelos en el santuario para que se presenten contigo.
Entonces tomé los hombres que eligieron, varios de cada tribu, y los señalé como jefes administrativos a cargo de mil, de cien, de cincuenta y de diez para decidir en sus dificultades y ayudarles en todo.
»Designa jueces y funcionarios administrativos en todas las ciudades que el Señor tu Dios te da. Ellos administrarán la justicia en todo el país.
Luego Josué convocó a todo el pueblo de Israel en Siquén, juntamente con sus ancianos, oficiales y jueces. Todos asistieron y se presentaron delante del Señor.
Los hijos que a Isaac le di fueron Jacob y Esaú. A Esaú le di el territorio que queda alrededor del monte Seír, mientras que Jacob y sus hijos entraron en Egipto.
Todo el pueblo de Israel, incluidos los ancianos, los oficiales, los jueces, y los extranjeros que vivían entre el pueblo se dividieron en dos grupos, la mitad de ellos al pie del monte Guerizín y la otra mitad al pie del monte Ebal. Entre ellos estaban de pie los sacerdotes con el cofre, listos para pronunciar la bendición. (Todo esto fue hecho de acuerdo con las instrucciones que Moisés había dejado).