Éxodo 5:10 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

^10-11 Los cuadrilleros y los capataces le informaron al pueblo: ―El faraón ha dado órdenes de que no les proporcionemos la paja para los ladrillos. Deben ir ustedes mismos a buscarla a donde puedan. Y deberán producir tantos ladrillos como antes.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

¹⁰ Y saliendo los cuadrilleros del pueblo y sus capataces, hablaron al pueblo, diciendo: Así ha dicho Faraón: Yo no os doy paja.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁰ Entonces los capataces y los jefes de cuadrilla salieron a informarle al pueblo: «El faraón dice lo siguiente: “Ya no les proporcionaré paja.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁰ Los capataces, pues, junto con sus secretarios israelitas, empezaron a apurar al pueblo: 'Así dice Faraón: No les daremos más paja.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁰ Saliendo entonces los supervisores y los caporales del pueblo, hablaron al pueblo, y les dijeron: Así ha dicho Faraón: ¡Ya no os doy más paja!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁰ Salieron los capataces y los inspectores del pueblo y dijeron a la gente: 'Así ha hablado el Faraón: 'Ya no os daré más paja.

Éxodo 5:10 Tagairtí Cros

Éxodo 1:11

Entonces los egipcios esclavizaron a los hebreos, y les pusieron capataces muy crueles. Estos les asignaron la dura tarea de edificar las ciudades de Pitón y Ramsés, que eran las ciudades donde el rey almacenaba todas las provisiones.

Éxodo 3:7

―He visto los profundos sufrimientos de mi pueblo en Egipto —le dijo el Señor—, y he oído sus oraciones en que piden liberación de sus duros capataces.

Éxodo 5:6

Ese mismo día, el faraón les envió la siguiente orden a sus cuadrilleros y a los capataces que tenían que vigilar el trabajo del pueblo de Israel:

Éxodo 5:9

¡Cárguenlos de trabajo y háganlos sudar! ¡Eso les enseñará a no prestar oídos a las mentiras de Moisés y de Aarón!».

Proverbios 29:12

Si el gobernante presta atención a las mentiras todos sus oficiales se corrompen.

Isaías 30:6

Véanlos avanzar lentamente a través del terrible desierto hacia Egipto, con burros y camellos cargados de tesoros para pagar el auxilio de Egipto. Atraviesan los yermos habitados por leones y veloces víboras. ¡Pero Egipto no les dará nada en cambio!