Finalmente, Moisés sintió tanto cansancio que no podía tener los brazos más tiempo en alto. Entonces Aarón y Jur le pusieron una piedra para que él se sentara, y ellos se pusieron a sus lados, sosteniendo sus brazos en alto hasta la puesta del sol.
Éxodo 17:13 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Como resultado, Josué y sus soldados derrotaron al ejército de Amalec a filo de espada. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y Josué deshizo a Amalec y a su pueblo a filo de espada. Biblia Nueva Traducción Viviente Como resultado, Josué aplastó al ejército de Amalec en la batalla. Biblia Católica (Latinoamericana) y Josué hizo una enorme matanza entre la gente de Amalec. La Biblia Textual 3a Edicion Y Josué deshizo° a Amalec y a su pueblo a filo de espada. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Josué venció a Amalec y a su pueblo a filo de espada. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Josué deshizo a Amalec y a su pueblo a filo de espada. |
Finalmente, Moisés sintió tanto cansancio que no podía tener los brazos más tiempo en alto. Entonces Aarón y Jur le pusieron una piedra para que él se sentara, y ellos se pusieron a sus lados, sosteniendo sus brazos en alto hasta la puesta del sol.
Luego, el Señor le ordenó a Moisés: «Escribe esto en un libro para que se recuerde siempre, y anuncia a Josué que borraré todo rastro de Amalec».
Unos morirán a filo de espada y a otros los llevarán prisioneros a todas las naciones. Los gentiles pisotearán a Jerusalén, hasta que llegue el tiempo señalado para ellos.
Aquel mismo día Josué destruyó la ciudad de Maquedá y mató a su rey y a todos los que vivían en ella. Ninguna persona de la ciudad quedó viva. Al igual que en Jericó.
El Señor se la entregó en el segundo día. Allí también mataron a toda la población, de la misma manera que lo habían hecho en Libná.
y la capturaron con todos los pueblos vecinos, y dieron muerte a toda la población. Ni una sola persona quedó con vida.
Todo esto fue hecho en una sola campaña, porque el Señor Dios de Israel estaba peleando por su pueblo.
Luego atacaron y destruyeron a las demás ciudades con sus reyes. Todos los habitantes fueron muertos de la manera que Moisés había ordenado mucho tiempo antes.
Josué había mantenido su lanza señalando hacia Hai hasta que la última persona murió.