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Efesios 3:2 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Sin duda ya se enteraron del plan que, en su amor, Dios me encargó para ustedes.

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Biblia Reina Valera 1960

si es que habéis oído de la administración de la gracia de Dios que me fue dada para con vosotros;

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Biblia Nueva Traducción Viviente

A propósito, doy por sentado que ustedes saben que Dios me encargó de manera especial extenderles su gracia a ustedes, los gentiles.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

A lo mejor han sabido de las gracias que Dios me concedió para bien de ustedes.

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La Biblia Textual 3a Edicion

si es que oísteis acerca de la administración de la gracia de Dios que me fue encomendada para vosotros,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

ya que habéis oído hablar de la misión de la gracia que Dios me ha concedido con respecto a vosotros:

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

si es que habéis oído de la dispensación de la gracia de Dios que me ha sido dada para con vosotros;

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Efesios 3:2
27 Tagairtí Cros  

Un día en que estos hombres estaban adorando al Señor y ayunando, el Espíritu Santo dijo: ―Apártenme a Bernabé y a Saulo para la tarea a la que los he llamado.


Entonces Pablo y Bernabé valientemente les dijeron: «Era necesario que las buenas noticias de Dios las conocieran primero ustedes los judíos. Pero como las rechazan y se muestran indignos de la vida eterna, no nos queda otro remedio que ofrecérselas a los gentiles.


Pero el Señor me dijo: “Vete, porque yo te enviaré a naciones que están lejos” ».


―Ve y haz lo que te digo —le respondió el Señor—. Yo lo he escogido para que pregone mi nombre tanto entre las naciones, delante de reyes, como al pueblo de Israel.


Por medio de Cristo, Dios derramó su gracia sobre nosotros y luego nos envió a todas las naciones, para que estas sean obedientes a la fe por amor a Cristo.


Como ustedes saben, Dios me envió a ustedes los gentiles y yo honro este servicio. Por ello les predico a ustedes, gentiles,


Como mensajero por la bondad de Dios les advierto que no se consideren mejores de lo que son; valórense según el grado de fe que Dios les ha dado.


Así que deben tenernos por siervos de Cristo encargados de impartir los secretos del Señor.


Ya estarán enterados de mi conducta cuando era de la religión judía. Saben que implacablemente perseguí a la iglesia de Dios y que me esforcé por erradicarla de la tierra.


Cuando llegue el tiempo preciso, Dios reunirá todas las cosas —las que están en el cielo y en la tierra— bajo una cabeza, Cristo.


Por su amor inmerecido, Dios me dio el privilegio de servirle anunciando estas buenas nuevas, con la ayuda eficaz de su poder.


Aunque soy el más pequeño de todos los que son parte del pueblo santo, Dios me concedió, por su amor, la misión de anunciar a las naciones el tesoro incalculable de Cristo.


Debo hacerles entender a todos que el plan de Dios ya se está cumpliendo. Ese es el plan que desde la eternidad Dios, el Creador de todas las cosas, guardaba oculto.


Si de veras han escuchado acerca del Señor y han aprendido a vivir como él, saben que la verdad está en Jesús.


Sin embargo, debido a su amor, Cristo nos ha dado a cada uno de nosotros dones diferentes.


porque nos han hablado de lo mucho que confían en el Señor y de cuánto amor le tienen al pueblo de Dios.


Esas buenas nuevas que escucharon ustedes están dando fruto y creciendo en todo el mundo, como también sucedió entre ustedes mismos desde el día en que escucharon y entendieron la gracia de Dios.


del glorioso evangelio que el bendito Dios me ha confiado.


ni prestaran atención a leyendas y a listas larguísimas de antepasados. Tales ideas provocan discusiones en vez de llevar adelante la obra de Dios que está fundada en la fe.


Y digo la verdad, sin mentir: he sido puesto como predicador y apóstol para enseñar esta verdad a los gentiles.


Dios me nombró apóstol suyo, con la tarea de predicar y enseñar ese mensaje.