Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Eclesiastés 3:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Tiempo de encontrar; Tiempo de perder; Tiempo de ahorrar; Tiempo de derrochar;

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

tiempo de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar;

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Un tiempo para buscar y un tiempo para dejar de buscar. Un tiempo para guardar y un tiempo para botar.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

tiempo para buscar y tiempo para perder; tiempo para conservar y tiempo para tirar fuera;'

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Tiempo de buscar y tiempo de perder, Tiempo de guardar y tiempo de desechar,

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Hay tiempo de buscar y tiempo de perder. Hay tiempo de guardar y tiempo de desechar.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Tiempo de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar;

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Eclesiastés 3:6
22 Tagairtí Cros  

Pero Eliseo le dijo: ―¿No comprendes que, con mi pensamiento, yo te estaba acompañando cuando Naamán descendió de su carro para encontrarse contigo? ¿Es tiempo de recibir dinero, ropa, olivares, viñedos, ovejas, bueyes y criados?


Fueron hasta el Jordán. A lo largo del camino fueron hallando la ropa y el equipo que habían arrojado los sirios en su prisa. Los espías volvieron y dieron la información al rey.


Dan generosamente a los necesitados. Sus buenas acciones jamás serán olvidadas. Tendrán influencia y honra.


Sé generoso en dar, pues más tarde volverán a ti tus regalos.


Tiempo de esparcir piedras; Tiempo de recoger piedras; Tiempo de abrazar; Tiempo de no abrazar;


Tiempo de romper; Tiempo de reparar; Tiempo de callar; Tiempo de hablar;


Por fin abandonarán sus ídolos de oro y plata a los topos y a los murciélagos,


Temerosos de perder la vida, los desesperados marineros gritaban pidiendo ayuda a sus dioses, y arrojaban la carga al mar para que la nave quedara más liviana. Mientras tanto, Jonás dormía profundamente en el fondo del barco.


Y cualquiera que haya dejado hogar, hermanos, hermanas, padre, madre, esposa, hijos, tierras, por seguirme, recibirá cien veces lo que haya dejado, aparte de recibir la vida eterna.


Al tercer día, con sus propias manos también arrojaron al mar los aparejos del barco.


Después de comer hasta quedar satisfechos, echaron el trigo al mar para hacer el barco más ligero.