«Vamos», dicen. «Conseguiremos vino y haremos fiesta; embriaguémonos. ¡Esto se llama vivir; que siga la fiesta, y mañana será aún mejor!».
Daniel 4:4 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Yo, Nabucodonosor, estaba viviendo en mi palacio, en paz y prosperidad, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Yo Nabucodonosor estaba tranquilo en mi casa, y floreciente en mi palacio. Biblia Nueva Traducción Viviente »Yo, Nabucodonosor, vivía en mi palacio con comodidad y prosperidad. Biblia Católica (Latinoamericana) Llegaron los magos, los adivinos, los brujos y los astrólogos, y les conté el sueño, pero nadie me dio la interpretación de él. La Biblia Textual 3a Edicion Yo Nabucodonosor estaba tranquilo en mi casa y floreciente en mi palacio. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Vinieron, pues, los magos, los adivinos, los caldeos y los astrólogos y les conté el sueño; pero no supieron darme la interpretación. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Yo Nabucodonosor estaba tranquilo en mi casa, y próspero en mi palacio. |
«Vamos», dicen. «Conseguiremos vino y haremos fiesta; embriaguémonos. ¡Esto se llama vivir; que siga la fiesta, y mañana será aún mejor!».
Desde su más temprana historia, Moab ha vivido en su lugar, libre de toda invasión. Es como vino que no ha sido trasvasado y conserva su fragancia y suavidad. ¡Pero ahora será derramado en el destierro!
»Se te subieron los humos a causa de toda tu hermosura; tu sabiduría te volvió engreído y perdiste tu esplendor. Por ello te he echado por los suelos y expuesto tu miserable situación ante la mirada curiosa de los reyes.
Comunícales que el Señor Dios dice: “¡Yo soy tu enemigo, faraón, rey de Egipto, quien te crees poderoso dragón echado en medio de tus ríos! Pues tú has dicho: ‘¡El Nilo es mío, yo lo he hecho para mí mismo!’.
Lo que el rey pide es imposible. Nadie, salvo los dioses, puede decirle su sueño, y ellos no están aquí para ayudar.
Entonces Daniel, también llamado Beltsasar, estuvo sentado allí en silencio por largo tiempo, turbado por el significado del sueño. Finalmente el rey le dijo: ―Beltsasar, no te preocupes por el sueño y por su significado. Daniel respondió: ―¡Oh, cómo quisiera que lo que ocurre en este sueño le sucediera a sus enemigos, mi señor, y no a usted!
Pero cuando llegaron los sabios, ninguno de ellos pudo entender la escritura ni decirle lo que significaba.
En aquel día buscaré cuidadosamente por toda Jerusalén a todos los tramposos, castigaré a los que reposan tranquilos después del robo; también a los que se atreven a pensar que el Señor no interviene ni para bien ni para mal.