2 Reyes 3:4 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 El rey Mesá, de Moab, y su pueblo eran criadores de ovejas. Pagaban a Israel un tributo anual de cien mil corderos y la lana de cien mil carneros; Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Entonces Mesa rey de Moab era propietario de ganados, y pagaba al rey de Israel cien mil corderos y cien mil carneros con sus vellones. Biblia Nueva Traducción Viviente Mesa, rey de Moab, se dedicaba a la cría de ovejas. Acostumbraba pagar al rey de Israel un tributo anual de cien mil corderos y la lana de cien mil carneros; Biblia Católica (Latinoamericana) Mesa, rey de Moab, tenía rebaños. Le pagaba al rey de Israel un tributo de cien mil corderos y cien mil carneros, y además la lana. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces Mesa, rey de Moab, era criador de ovejas y tributaba al rey de Israel la lana de cien mil corderos, y cien mil carneros lanudos.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Mesá, rey de Moab, se dedicaba a la cría de ganado y pagaba al rey de Israel un tributo de cien mil corderos y cien mil carneros con su lana. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Mesa rey de Moab era propietario de ganados, y pagaba al rey de Israel cien mil corderos, cien mil carneros, más la lana. |
También venció a los moabitas, a quienes hizo tender en el suelo y los midió con un cordel. A todos los que quedaron dentro de las dos primeras medidas los hizo matar, pero dejó con vida a los que estaban en la tercera medida. Y los moabitas se convirtieron en vasallos y tributarios de David.
David situó varias guarniciones en Damasco, y los sirios fueron súbditos de David y le presentaban anualmente sus tributos. El Señor le daba victorias en todas las campañas militares que emprendía.
También conquistó Moab, y exigió a sus habitantes que le entregaran todos los años una elevada suma de dinero.
También construyó fortalezas en el sur, e hizo muchos estanques de agua, porque tenía mucho ganado en los valles y en las llanuras. Fue un hombre que amaba la agricultura, y tuvo muchas haciendas y viñedos en las laderas y en los valles fértiles.
Así el Señor bendijo a Job al final de su vida, más que al comienzo. Pues ahora tenía catorce mil ovejas, seis mil camellos, mil yuntas de bueyes y mil burras.
Moab llegará a ser mi siervo humilde y Edom, mi esclavo. Y yo elevaré gritos de triunfo sobre las filisteos!».