Y tú, Esdras, conforme a la sabiduría de tu Dios que tienes, nombra magistrados y jueces que juzguen a todo el pueblo que está más allá del río, es decir, a todos los que conocen las leyes de tu Dios; y enseñad al que no las conoce.
Mateo 23:2 - Biblia Version Moderna (1929) diciendo: Los escribas y los fariseos se sientan en la cátedra de Moisés: Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 En la cátedra de Moisés se sientan los escribas y los fariseos. Biblia Nueva Traducción Viviente «Los maestros de la ley religiosa y los fariseos son los intérpretes oficiales de la ley de Moisés. Biblia Católica (Latinoamericana) Los maestros de la Ley y los fariseos han ocupado el puesto que dejó Moisés. La Biblia Textual 3a Edicion diciendo: En la cátedra de Moisés se sientan° los escribas y los fariseos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 'En la cátedra de Moisés se han sentado los escribas y los fariseos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) diciendo: En la cátedra de Moisés se sientan los escribas y los fariseos: |
Y tú, Esdras, conforme a la sabiduría de tu Dios que tienes, nombra magistrados y jueces que juzguen a todo el pueblo que está más allá del río, es decir, a todos los que conocen las leyes de tu Dios; y enseñad al que no las conoce.
este Esdras subió de Babilonia a Jerusalem; y era hábil escriba de la ley de Moisés, que había dado Jehová, el Dios de Israel; y el rey le había concedido, según era buena la mano de Jehová sobre él, todo cuanto pidió.
Porque los labios del sacerdote han de guardar la ciencia, y de sus labios los hombres deben buscar la ley; porque mensajero es de Jehová de los Ejércitos.
todo cuanto os dijeren, pues, guardadlo y hacedlo; pero no hagáis conforme a sus obras; porque dicen y no hacen.
¶Y en su enseñanza dijo: Guardaos de los escribas, que gustan de andar en derredor con ropas largas, y aman las salutaciones en las plazas,
Guardaos de los escribas, que gustan andar en derredor con ropas largas, y aman las salutaciones en las plazas, y las primeras sillas en las sinagogas, y los primeros puestos en las cenas;
Ciertamente él ha amado a nuestras tribus; todos sus santos están en tu mano; y ellos se sentaron a tus pies; cada uno recibió tus palabras.