El joven respondió: 'Yo me encontraba por casualidad en el monte Gelboé, y vi a Saúl apoyándose sobre su lanza y asediado por carros y caballeros.
Rut 2:3 - Biblia Martin Nieto Rut salió para espigar en un campo detrás de los segadores, y quiso la providencia que fuese a dar a una parcela de Booz, de la familia de Elimélec. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Fue, pues, y llegando, espigó en el campo en pos de los segadores; y aconteció que aquella parte del campo era de Booz, el cual era de la familia de Elimelec. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que Rut salió a recoger espigas detrás de los cosechadores, y resultó que lo hizo en un campo que pertenecía a Booz, el pariente de su suegro, Elimelec. Biblia Católica (Latinoamericana) Como ella se lo diera, Rut salió al campo y se puso a espigar detrás de los segadores. Dio la coincidencia de que el campo adonde ella había llegado pertenecía a Booz, pariente de Elimelec, que precisamente llegó ese día de Belén. La Biblia Textual 3a Edicion Fue pues, y al llegar, espigó en el campo tras los segadores. Y ocurrió que aquella parte del campo era precisamente de Booz, el cual era de la familia de Elimelec. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Fue, pues, y se puso a espigar en un campo tras los segadores. Casualmente aquel campo era propiedad de Booz, de la familia de Elimélec. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Fue, pues, y llegando, espigó en el campo en pos de los segadores; y aconteció por ventura, que la parte del campo era de Boaz, el cual era de la parentela de Elimelec. |
El joven respondió: 'Yo me encontraba por casualidad en el monte Gelboé, y vi a Saúl apoyándose sobre su lanza y asediado por carros y caballeros.
Se encontraba allí un hombre perverso, llamado Sebá, hijo de Bicrí, un benjaminita, que tocó la trompeta y dijo: 'Nosotros no tenemos parte con David, nosotros no tenemos herencia con el hijo de Jesé. ¡Cada uno a sus tiendas, Israel!'.
Y mientras él contaba al rey cómo había resucitado a un muerto, llegó la mujer a cuyo hijo había resucitado para reclamar ante el rey su casa y su campo. Guejazí dijo: '¡Oh rey, mi señor!, ésta es la mujer y éste es el hijo al que Eliseo resucitó'.
¿No se venden dos pájaros por unos cuartos? Y, sin embargo, ninguno de ellos cae en tierra sin el consentimiento de vuestro Padre.
Un sacerdote bajaba por aquel camino; al verlo, dio un rodeo y pasó de largo.
Pues bien, a estos tales exhortamos y amonestamos en nombre de Jesucristo, el Señor, a trabajar en paz y a ganarse el pan que comen.
Un día Rut, la moabita, dijo a su suegra: 'Déjame ir a espigar al campo del que me lo permita'. Ella le respondió: 'Anda, hija mía'.
Booz de Belén llegó y saludó a los segadores: 'El Señor esté con vosotros'. Ellos le respondieron: 'El Señor te bendiga'.