No vayas tras la multitud para hacer el mal ni declares en un pleito inclinándote a la mayoría, violando la justicia.
Proverbios 28:21 - Biblia Martin Nieto No es bueno tener acepción de personas, por un bocado de pan el hombre peca. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Hacer acepción de personas no es bueno; Hasta por un bocado de pan prevaricará el hombre. Biblia Nueva Traducción Viviente Nunca es bueno mostrar parcialidad, incluso algunos hacen lo malo por un simple pedazo de pan. Biblia Católica (Latinoamericana) Uno debiera ser imparcial, pero hay algunos que se venden por un trozo de pan. La Biblia Textual 3a Edicion Hacer acepción de personas no es bueno, Pero, ¡hasta por un bocado de pan puede prevaricar el hombre! Biblia Serafín de Ausejo 1975 No es bueno discriminar a las personas; por un trozo de pan el hombre delinque. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Hacer acepción de personas, no es bueno. Hasta por un bocado de pan prevaricará el hombre. |
No vayas tras la multitud para hacer el mal ni declares en un pleito inclinándote a la mayoría, violando la justicia.
No aceptarás regalos, porque el regalo ciega incluso a los que tienen la vista clara y pervierte las palabras de los justos.
No es bueno tener consideración con el culpable para perjudicar al inocente en el juicio.
También éstas son palabras de los sabios: Tener acepción de personas en el juicio no está bien.
Me habéis profanado ante mi pueblo por un puñado de cebada y un pedazo de pan, dais muerte a quien debe vivir y dejáis vivir a quien debe morir, engañando a mi pueblo que cree en mentiras.
Cuando terminan sus borracheras, comienzan sus prostituciones; cambian la gloria por la ignominia.
Esto dice el Señor sobre los profetas que engañan a mi pueblo; cuando tienen algo que masticar entre sus dientes, entonces gritan: '¡Paz!', pero a quien no les pone nada en la boca le declaran la guerra.
Sólo emplean las manos para hacer el mal: los funcionarios exigen recompensas, los jueces se dejan sobornar por regalos, los poderosos manifiestan sus ambiciones.
porque ésos no sirven a Cristo nuestro Señor, sino a su estómago, y con palabras dulces y agradables engañan a la gente sencilla.
No tengáis en cuenta en vuestros juicios la apariencia de la persona; oíd a los pequeños lo mismo que a los grandes sin temor a nadie, pues el juicio pertenece a Dios. Y si os encontráis con alguna causa difícil, traedla a mí para que yo la resuelva.
Llevados de la avaricia, os explotarán con palabras llenas de falsedad; hace mucho tiempo que la condenación los amenaza y su ruina no duerme.